A ver quien tiene valor, en cojer mi antocha.
Mirar, es que en algún tiempo pasado, mi bisabuelo, estaba ejeciendo de Júez en un pueblecito de
Castellón (Morella) y por unas desaveniencias con el "cacique" del
pueblo, éste consiguió lo trasladaran al punto más opueto de nuestra Península.
Allí falleció, presa de una gripe, la cual según se vé, carecía de los subsiguientes aticuerpos, y sin que Sir Artug Fleming, todavía no se peractara del efecto bactericida de una especie de
hongo, pues "la
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