03-11-11 09:50
#9042020
Salustiano Borrascas
La Musa
Badajoz.
¡Y encima se ríen estos caprones! ¿Cuántas veces las personas corrientes y molientes, han exclamado lo mismo en observando la actitud de esta gente cuando están en el banquillo? Que yo sepa, cada vez que dan por la telegansa escenas semejantes; lo que pasa es que, en esta ocasión, la expresión ha salido de la boquita piñonera de la señoría que presidía. Pero ese su dicharrachajo, señoría, puede dar al traste con un montón de años de trabajo no sólo por parte de la pestañí, sino de la misma administración de justicia en lo que a la preparación del juicio se refiere porque, le van a alegar animosidad manifiesta.
Por eso, y aparte de lo que opine El Chichón Party de los madriles y sus delegaciones de “provincias” en sus farragosas matinales radiadas, televisadas y escritas, debemos tener en cuenta que, nuestros tarros, son bizcos, quiero decir, que ven sólo lo que quieren ver, por ejemplo, si alguien nos cae tan mal o peor que un tiro mierda, nada más que veremos de él sus defectos, nunca sus virtudes si es que tienen algunas. Al parecer, es el caso del otrora por mi admirado sin condiciones, Arturo Pérez-Reverte; cuya saña contra el actual presidente del Gobierno de España, o de las Españas, es mas que evidente por demostrada. Y es que, digo yo, que aparte de ser tan tonto como dice y tan malo, que alguna virtud tendrá ¿no, pitxa?, otra cosa es que tú no la quieras ver porque no te pagan para eso o que, en el peor de los casos por tratarse de ti, efectivamente es que no se las ves. Pero no pasa nada Arturo, eres humano y como tal aciertas o te equivocas supongo que como todo el mundo, muchas veces. No obstante, tus opiniones son recogidas por gente que, como yo, pueda tener una visión sesgada y lo vea todo con su ojo tuerto, de ahí, que seas por ellos muy jaleado. Te está pasando como le pasó a Vizcaíno Casas durante la Transición, que toda la España cavernícola lo aplaudía, hasta que pasó aquél bache. Tu no, tu pasarás a la historia porque tú, a mi parecer, eres un magnífico escritor que me ha hecho pasar ratos inolvidables desde que te conocí en Territorio Comanche hasta nuestros días. Pero como te decía, vemos lo que queremos ver y, ninguno de estos que te gritan ¡bravo, bravo!, y te dan guantacitos regocijados en la espalda, se han fijado en este significativo párrafo de ese mismo escrito en el que pones a parir, una vez más, a Zapatero y que dice:
“Y ahora, cuando se va usted a hacer puñetas, deja un Estado desmantelado, indigente, y tal vez en manos de la derecha conservadora para un par de legislaturas. Con monseñor Rouco y la España negra de mantilla, peineta y agua bendita, que tanto nos había costado meter a empujones en el convento, retirando las bolitas de naftalina, radiante, mientras se frota las manos”.
Si hombre, si, ya lo sé, son opiniones, sólo opiniones, en realidad, el escrito entero, son sólo opiniones pero, yo me pregunto, ¡al servicio de quién o quiénes?. Aunque no tienes porqué contestar, tu puedes poner tu pluma al servicio de quien te de la gana, ¡pues faltaría más!
Salud.
#9042020
Salustiano Borrascas
La Musa
Badajoz.
¡Y encima se ríen estos caprones! ¿Cuántas veces las personas corrientes y molientes, han exclamado lo mismo en observando la actitud de esta gente cuando están en el banquillo? Que yo sepa, cada vez que dan por la telegansa escenas semejantes; lo que pasa es que, en esta ocasión, la expresión ha salido de la boquita piñonera de la señoría que presidía. Pero ese su dicharrachajo, señoría, puede dar al traste con un montón de años de trabajo no sólo por parte de la pestañí, sino de la misma administración de justicia en lo que a la preparación del juicio se refiere porque, le van a alegar animosidad manifiesta.
Por eso, y aparte de lo que opine El Chichón Party de los madriles y sus delegaciones de “provincias” en sus farragosas matinales radiadas, televisadas y escritas, debemos tener en cuenta que, nuestros tarros, son bizcos, quiero decir, que ven sólo lo que quieren ver, por ejemplo, si alguien nos cae tan mal o peor que un tiro mierda, nada más que veremos de él sus defectos, nunca sus virtudes si es que tienen algunas. Al parecer, es el caso del otrora por mi admirado sin condiciones, Arturo Pérez-Reverte; cuya saña contra el actual presidente del Gobierno de España, o de las Españas, es mas que evidente por demostrada. Y es que, digo yo, que aparte de ser tan tonto como dice y tan malo, que alguna virtud tendrá ¿no, pitxa?, otra cosa es que tú no la quieras ver porque no te pagan para eso o que, en el peor de los casos por tratarse de ti, efectivamente es que no se las ves. Pero no pasa nada Arturo, eres humano y como tal aciertas o te equivocas supongo que como todo el mundo, muchas veces. No obstante, tus opiniones son recogidas por gente que, como yo, pueda tener una visión sesgada y lo vea todo con su ojo tuerto, de ahí, que seas por ellos muy jaleado. Te está pasando como le pasó a Vizcaíno Casas durante la Transición, que toda la España cavernícola lo aplaudía, hasta que pasó aquél bache. Tu no, tu pasarás a la historia porque tú, a mi parecer, eres un magnífico escritor que me ha hecho pasar ratos inolvidables desde que te conocí en Territorio Comanche hasta nuestros días. Pero como te decía, vemos lo que queremos ver y, ninguno de estos que te gritan ¡bravo, bravo!, y te dan guantacitos regocijados en la espalda, se han fijado en este significativo párrafo de ese mismo escrito en el que pones a parir, una vez más, a Zapatero y que dice:
“Y ahora, cuando se va usted a hacer puñetas, deja un Estado desmantelado, indigente, y tal vez en manos de la derecha conservadora para un par de legislaturas. Con monseñor Rouco y la España negra de mantilla, peineta y agua bendita, que tanto nos había costado meter a empujones en el convento, retirando las bolitas de naftalina, radiante, mientras se frota las manos”.
Si hombre, si, ya lo sé, son opiniones, sólo opiniones, en realidad, el escrito entero, son sólo opiniones pero, yo me pregunto, ¡al servicio de quién o quiénes?. Aunque no tienes porqué contestar, tu puedes poner tu pluma al servicio de quien te de la gana, ¡pues faltaría más!
Salud.
