Mi compadre Pepiño, tiene que estar como un flan, con la boquita echa agua, pero el duende, lo mas seguro es que esté trinando, porque eso de que al llegar a casita te la encuentres con las entradas tapiadas, tiene que encorajinar mucho, y encima, CHONI dice que va a poner en marcha la viperina si se sobrepasa con la de la fuente.
El otro día creo que no me expresé bien con el asunto de los idiomas, sólo quería hacer notar que el árabe está presente, vivo y coleando en el nuestro, y que lo usamos sin darnos cuenta. Por eso escribí unas cuantas palabras de las más de cuatro mil que contiene el léxico español, sin tener en cuenta los topónimos que jalonan el territorio peninsular.
Un catedrático granadino, dijo hace un tiempo ( aunque se armó la marimorena) que, cuando en algunos sitios del norte aún hacía feo eso de lavarse todos los días, en algunas ciudades de Al-Andalus florecían con esplendor las artes, la filosofía, la medicina, la astronomía, las buenas letras y, en un ambiente rural como el nuestro, no debemos olvidar la agricultura.
Sólo decirle a quien se salió por los cerros de úbeda, que el muchacho que mató, descuartizó a sus padres y los medio enterró en el jardín de una hermosa casa, no había llegado a España en patera o cayuco.
Robespierre.
El otro día creo que no me expresé bien con el asunto de los idiomas, sólo quería hacer notar que el árabe está presente, vivo y coleando en el nuestro, y que lo usamos sin darnos cuenta. Por eso escribí unas cuantas palabras de las más de cuatro mil que contiene el léxico español, sin tener en cuenta los topónimos que jalonan el territorio peninsular.
Un catedrático granadino, dijo hace un tiempo ( aunque se armó la marimorena) que, cuando en algunos sitios del norte aún hacía feo eso de lavarse todos los días, en algunas ciudades de Al-Andalus florecían con esplendor las artes, la filosofía, la medicina, la astronomía, las buenas letras y, en un ambiente rural como el nuestro, no debemos olvidar la agricultura.
Sólo decirle a quien se salió por los cerros de úbeda, que el muchacho que mató, descuartizó a sus padres y los medio enterró en el jardín de una hermosa casa, no había llegado a España en patera o cayuco.
Robespierre.