La
Iglesia de
Santa Catalina, de origen
gótico, sufrió varios incendios. El tempño actual, que fue levantado tras el derribo del antiguo en 1666, presenta un estilo de transición del barroco al neoclásico. De la primitiva traza
gótica queda una puertecilla del siglo XIV, situada junto a la
torre de 1688. Tiene planta octogonal y consta de cinco cuerpos.