En 1305 se firmó en la villa el Tratado de
Elche, un acuerdo realizado entre los reinos de Castilla y de
Aragón en donde se fijaron nuevos límites fronterizos de estos reinos, pasando Elche, junto con otros lugares como
Alicante u Orihuela, al Reino de
Valencia. Sin embargo, el señorío siguió en manos del castellano don Juan Manuel.