CALPE: EN CALPE NI LLUEVE NI DEJA...

EN CALPE NI LLUEVE NI DEJA
“Como el perro del hortelano, ni come las berzas, ni las deja comer”, La lluvia lanza suspiros para regar estos campos, que parecen atrevidos y solo dan sobresaltos. En Calpe cuesta la lluvia lo dicen sus habitantes, parece ponerse tibia en muchos de sus instantes. Hablan de la gota fría en las tierras de Levante, y cualquier mañana fría el ambiente es delirante. Calpe pensando en mojarte estas mañanas calientes, donde pudieras calarte entre lluvias delirantes. Septiembre siempre se dijo, “Se secan las fuentes o se lleva los puentes”. Que verdades más serenas en las fechas de sequía, a veces tiemblan las penas en perfecta sintonía. El Peñón se ve tranquilo al ver las nubes pasando, sus piedras tienen el filo de un cuchillo bien cortando. Calpe mirando a su cielo que parece de colores, alguien soñará consuelo para aliviar sus dolores. Entre sombras de las nubes en Calpe vas caminando, dicen que bajas y subes y pudieras ir cantando. La lluvia se va marchando sin dejar apenas huellas, las nubes se van flotando camino de las estrellas. Este ambiente de septiembre con los campos resecados, quizá sueñen con noviembre para verse más regados. Es el Levante sediento con calores castigado, donde se ve sufrimiento, pero jamás humillado. Andando bajo la lluvia sin buscar acogimiento, la mañana si quería lanzar campanas al viento. Calpe soñando despierta con la lluvia placentera, más la lluvia que se ausenta sueña con la primavera. Lluvia que deja complejos entre muchos moradores, hoy parece que de lejos busca a ciertos pobladores. G X Cantalapiedra.