ESTOY SINTIENDO LAS OLAS EN CALPE
Noche y día soy testigo de sus ruidos machacones, que nunca serán castigo si en ellos veo razones. Calpe tiene fuertes vientos que azotan bien las palmeras, parece que dan alientos en tiempos de primaveras. Olas que vienen, olas que van, entre vaivenes la soledad, olas que siguen marcando fechas, sombras que llegan hoy muy derechas. Calpe nos llena de su dulzura, en sus laderas corren los vientos, que son momentos que no hay cordura si no vivimos los pensamientos. Nunca quisiera ver la amargura de ciertas gentes muy sufridoras, ayer me hablaron de la locura cuando a los cielos siempre la imploras. Viendo las piedras que tiene Ifach, el recorrido se vuelve eterno, a veces cuesta mirando atrás por si nos hablan del frío invierno. Siento las olas de madrugada, noto los vientos muy desgarrados, en ciertos ecos no entiendo nada al ver los vientos tan demacrados. Calpe despierta con luz del día, entre palmeras muy solitarias, algunas de ellas sin armonía en muchas fechas extraordinarias. Voy caminando sin grandes prisas, por las laderas siempre buscadas, dicen que corren muy bien las brisas por esas tiendas tan bien cuidadas. Calpe de flores que van brotando entre los vientos del mar adentro, hay muchas flores que van pensando sin decir nunca donde es el centro. Entre pasiones de marineros buscando brisas que me acompañen, viendo los rumbos aventureros quiero paisajes que no me engañen. Hay muchas noches con ROMANCERO, entre miradas al horizonte, dicen que corre siempre el dinero en las viviendas del puro monte. Calpe te marca tus ilusiones, entre las olas que dejan huellas, hoy no quisiera romper razones al ver las noches que son tan bellas. G X Cantalapiedra.
Noche y día soy testigo de sus ruidos machacones, que nunca serán castigo si en ellos veo razones. Calpe tiene fuertes vientos que azotan bien las palmeras, parece que dan alientos en tiempos de primaveras. Olas que vienen, olas que van, entre vaivenes la soledad, olas que siguen marcando fechas, sombras que llegan hoy muy derechas. Calpe nos llena de su dulzura, en sus laderas corren los vientos, que son momentos que no hay cordura si no vivimos los pensamientos. Nunca quisiera ver la amargura de ciertas gentes muy sufridoras, ayer me hablaron de la locura cuando a los cielos siempre la imploras. Viendo las piedras que tiene Ifach, el recorrido se vuelve eterno, a veces cuesta mirando atrás por si nos hablan del frío invierno. Siento las olas de madrugada, noto los vientos muy desgarrados, en ciertos ecos no entiendo nada al ver los vientos tan demacrados. Calpe despierta con luz del día, entre palmeras muy solitarias, algunas de ellas sin armonía en muchas fechas extraordinarias. Voy caminando sin grandes prisas, por las laderas siempre buscadas, dicen que corren muy bien las brisas por esas tiendas tan bien cuidadas. Calpe de flores que van brotando entre los vientos del mar adentro, hay muchas flores que van pensando sin decir nunca donde es el centro. Entre pasiones de marineros buscando brisas que me acompañen, viendo los rumbos aventureros quiero paisajes que no me engañen. Hay muchas noches con ROMANCERO, entre miradas al horizonte, dicen que corre siempre el dinero en las viviendas del puro monte. Calpe te marca tus ilusiones, entre las olas que dejan huellas, hoy no quisiera romper razones al ver las noches que son tan bellas. G X Cantalapiedra.
