Descendiendo, pasamos por la que era la
Casa del Gobernador, con tres estancias ahora convertidas en
Museo de la Ciudad. Por una gran
puerta, que era por donde se entraba a esta antigua alcazaba
medieval, podemos ver la Sala Larga primero y el Antiguo
Hospital, ahora también salas del MUSA. Por debajo de ellas un foso, y siguiendo el foso o el
camino, llegamos al albacar d’en mig protegido por cuatro
torres y que es donde se solía refugiar la población en caso de ataques.