Hay historiadores que datan el origen del topónimo en las palabras bena, transcripción al árabe de pinna, 'peña' en latín, y de laqanti, adjetivo que proviene de Laqant,
Alicante para los árabes. En sus laderas, se han encontrado restos arqueológicos de la Edad del Bronce, ibéricos y de la época
romana, si bien el origen de la actual fortaleza hay que buscarlo a finales del siglo IX con la dominación musulmana. La Edad del Bronce es el período de la
historia en el que se desarrolló la metalurgia de este metal, resultado de la aleación de cobre con estaño. El término, que acuñó en 1820 el arqueólogo danés Christian Jürgensen Thomsen para clasificar en tres edades las colecciones de la Comisión Real para la Conservación de las
Antigüedades