Las mayordomías, ésta y todas, son mayordomías del Santísimo Cristo del Rayo, no del carnaval. Lo que tienen que hacer las personas que se gastan el dinero en disfraces es organizarse el carnaval en colaboración con el Ayuntamiento y dejar tranquilas a las mayordomías.
Los que se dedican sólo a criticar a las personas que pasan un año trabajando para organizar las fiestas, repito, del Santísimo Cristo del Rayo, tendrían que dar la cara y a la hora de hacer la crítica lo que deberían hacer es identificarse y no ampararse en la cobardía de un escrito anónimo.
Yo soy socio de las fiestas y no quiero que el dinero de la vaca se dedique al carnaval, así que si la mayordomía colabora con poco dinero para esta fiesta, eso que hay que agradecerle; porque su labor es trabajar por la fiesta del Santísimo Cristo del Rayo y a quien le guste disfrazarse que se organice el carnaval o que hable con el Ayuntamiento y que nombren una mayordomía del carnaval. De esta manera podrán dedicar todo el dinero que recauden con su trabajo a los premios del carnaval y éstos serán más abundantes.
Yo he sido mayordomo y no le deseo a nadie la experiencia de ir intentanto organizar un desfile que no me correspondía hacer. Cuando se paraba un grupo de mujeres disfrazadas, intentábamos explicarles y rogarles para que siguieran caminando, la respuesta era siempre que no les daba la gana y que si nos atrevíamos, que las tocásemos. ¿Qué hacer ante esta actitud?
Por eso, lo mejor es que se haga como se hace en otros pueblos: que sean las personas que participan en el carnval quienes lo organicen y dejen tranquilas a las mayordomías de la fiesta de la vaca.
Con esto no sólo defiendo a la actual mayordomía, sino a todas aquellas que han sufrido la crítica descarnada de quien sólo sabe hacer eso, pero que es incapaz de mojarse por su pueblo.
Los que se dedican sólo a criticar a las personas que pasan un año trabajando para organizar las fiestas, repito, del Santísimo Cristo del Rayo, tendrían que dar la cara y a la hora de hacer la crítica lo que deberían hacer es identificarse y no ampararse en la cobardía de un escrito anónimo.
Yo soy socio de las fiestas y no quiero que el dinero de la vaca se dedique al carnaval, así que si la mayordomía colabora con poco dinero para esta fiesta, eso que hay que agradecerle; porque su labor es trabajar por la fiesta del Santísimo Cristo del Rayo y a quien le guste disfrazarse que se organice el carnaval o que hable con el Ayuntamiento y que nombren una mayordomía del carnaval. De esta manera podrán dedicar todo el dinero que recauden con su trabajo a los premios del carnaval y éstos serán más abundantes.
Yo he sido mayordomo y no le deseo a nadie la experiencia de ir intentanto organizar un desfile que no me correspondía hacer. Cuando se paraba un grupo de mujeres disfrazadas, intentábamos explicarles y rogarles para que siguieran caminando, la respuesta era siempre que no les daba la gana y que si nos atrevíamos, que las tocásemos. ¿Qué hacer ante esta actitud?
Por eso, lo mejor es que se haga como se hace en otros pueblos: que sean las personas que participan en el carnval quienes lo organicen y dejen tranquilas a las mayordomías de la fiesta de la vaca.
Con esto no sólo defiendo a la actual mayordomía, sino a todas aquellas que han sufrido la crítica descarnada de quien sólo sabe hacer eso, pero que es incapaz de mojarse por su pueblo.