Nací en las Torres de Cotillas, hace más de tres cuartos de siglo. En octubre pasado tuve la oportunidad de pasar varias horas a lo largo de tres días. Quedé muy impresionado por el enorme desarrollo que ha experimentado el municipio y me satisfizo comprobar que, además del crecimiento de la industria y de la vivienda, los munícipes tuvieron la sensibilidad de preocuparse por dotar al pueblo de algún parque y zonas verdes y, sobre todo, de un espléndido Centro Cultural en el que está integrada una importante y bien dotada Biblioteca. Lo mejor de todo es que mi dos visitas al Centro Cultural fueron en días laborables y la Biblioteca estaba muy concurrida, principalmente, por jóvenes y niños.
También tuve la oportunidad de saludar a ese gran poeta Torreño que se llama SALVADOR SANDOVAL, autor de bastantes obras poéticas, en las que expresa de forma brillante su profundo amor por la tierra que le vió nacer. Salvador es un hombre tan sencillo que casi se averguenza de su maravillosa capacidad para descubrirnos los colores, aromas, sabores, variedades de la fauna y flora y la clamorosa luz de nuestra tierra. La lectura de su poesía me ha devuelto a mi niñez y primera juventud, como si hubiera retrocedido sesenta años, haciéndome sentir con todo realismo las vivencias de aquellos lejanos pero nunca olvidados años.
He advertido un considerable deterioro de las huertas situadas en las
Inmediaciones de la población y en todas las colindantes con las nuevas carreteras. También he advertido demasiada suciedad en los bordes y aledaños de las carreteras y bastante descuido en alguna de las zonas del pueblo. Es sabido que sin la colaboración de los ciudadanos las tareas de los servicios de limpieza nunca resultará satisfactorios, pero es probable que las autoridades municipales puedan hacer algo más sobre ese particular y sobre el estado de las pavimentaciones y aceras. Una adecuada programación de las obras municipales y una exigente vigilancia de las particulares, también ayudaría a mejorar la calidad de vida de los torreños. Habría que tomarse en serio la recomendación que hace JAVI en el sentido de que la reparación de los baches de las calles debiera ser prioritaria sobre la actuación de determinados artistas en las fiestas del pueblo.
Un ruego final a quienes lean estas líneas: No nos aprovechemos del anonimato de estas comunicaciones, para dejar constancia de nuestra probeza de espíritu o de nuestras flaquezas. Las Torres de Cotillas merece nuestra confianza en su futuro y si hemos de realizar alguna crítica hagamosló con claridad y como recomienda la página, de <<forma inteligente>> Jesús Machés Huecas JESUSMACHES@terra.es.
También tuve la oportunidad de saludar a ese gran poeta Torreño que se llama SALVADOR SANDOVAL, autor de bastantes obras poéticas, en las que expresa de forma brillante su profundo amor por la tierra que le vió nacer. Salvador es un hombre tan sencillo que casi se averguenza de su maravillosa capacidad para descubrirnos los colores, aromas, sabores, variedades de la fauna y flora y la clamorosa luz de nuestra tierra. La lectura de su poesía me ha devuelto a mi niñez y primera juventud, como si hubiera retrocedido sesenta años, haciéndome sentir con todo realismo las vivencias de aquellos lejanos pero nunca olvidados años.
He advertido un considerable deterioro de las huertas situadas en las
Inmediaciones de la población y en todas las colindantes con las nuevas carreteras. También he advertido demasiada suciedad en los bordes y aledaños de las carreteras y bastante descuido en alguna de las zonas del pueblo. Es sabido que sin la colaboración de los ciudadanos las tareas de los servicios de limpieza nunca resultará satisfactorios, pero es probable que las autoridades municipales puedan hacer algo más sobre ese particular y sobre el estado de las pavimentaciones y aceras. Una adecuada programación de las obras municipales y una exigente vigilancia de las particulares, también ayudaría a mejorar la calidad de vida de los torreños. Habría que tomarse en serio la recomendación que hace JAVI en el sentido de que la reparación de los baches de las calles debiera ser prioritaria sobre la actuación de determinados artistas en las fiestas del pueblo.
Un ruego final a quienes lean estas líneas: No nos aprovechemos del anonimato de estas comunicaciones, para dejar constancia de nuestra probeza de espíritu o de nuestras flaquezas. Las Torres de Cotillas merece nuestra confianza en su futuro y si hemos de realizar alguna crítica hagamosló con claridad y como recomienda la página, de <<forma inteligente>> Jesús Machés Huecas JESUSMACHES@terra.es.