La construcción del Embalse de Pinilla en el río Lozoya, fue un hecho de capital importancia en el Valle, que además de su repercusión en el paisaje y en el medio, supuso un periodo de actividad constructiva desconocida en la zona. Para respetar los núcleos de Pinilla y de Lozoya se tuvo que fijar el nivel máximo de agua a la cota 1.089, 9 m. Aún así, se anegaron unos 12 edificios y hubo que trasladar el cementerio.