MADRID: EL NIÑO DIOS ...

EL NIÑO DIOS

Reinaba un silencio impresionante
esperando que se iluminara el BELÉN,
como si llegara un Dios de las alturas
y pusiese en movimiento un gran “Edén”.
Todos sabíamos que era algo artificial,
mas algo había en el ambiente
que llenaba de misterio aquel lugar.
Fue un tiempo magistral,
el silencio se convirtió en exclamación,
y grandes y pequeños se llenaron de gozo
ante aquella Santa tradición.
La representación nos la mostraron
en un bosque encantador,
los árboles hablaban,
los personajes del bosque cantaban su canción.
“El Nacimiento” de este año
giraba ante el portón,
la gente seguía con la idea
de que cada año nos nace el Niño Dios.
Del bosque salían Villancicos,
los árboles mostraban su esplendor
como artistas improvisados
ante aquella divina expectación.
Los niños estaban como embelesados,
para ellos era algo irreal
ver todo un mundo en movimiento,
la gente cantaba entorno aquel Portal.
¡La canción decía a toda voz,
que el bosque era esplendoroso
que el bosque era belleza
que todo estaba en flor!
Y todos parecían que la conocían,
era algo que daba pena, o dolor,
y que era una alegría triste
que encierra un gran amor.
La función fue tan grande,
lo que allí se representó,
la exclamación fue tan tremenda,
que cuando se cerró el telón
el público estaba convencido
que había nacido “ El Niño Dios”.

******

Manuel Gonzalez