Ya dicen, que habiendo cotizado 38 tacos, el personal de a píe tendrá derecho a una pensioncita si llega vivo a los 65.
La verdad es, que tenemos que estarle todos los curritos muy agradecidos a estos seres tan benefactores que luchan denodadamente para que seamos
felices y comamos perdices con nuestros dientes de plástico cuando nos bajemos del andamio, o del guindo, o afloremos a la superficie como florecillas en
primavera tras haber pasado todo ese tiempo, en una
mina, por ejemplo.