Interior del
Jardín del Príncipe de Anglona.
Plaza de la Paja, 6, con
calle Príncipe de Anglona.
Al norte de la plaza de la Paja se conserva el jardín del Príncipe de Anglona, una de las escasas muestras de
jardines nobiliarios del siglo XVIII de
Madrid. Junto a él, aunque ya fuera de la Plaza de la Paja, se levanta el
palacio del Príncipe de Anglona, obra del siglo XVI.
Al inicio del siglo XXI se urbanizó este espacio con un
parque de tierra prensada con algunos
árboles dispuestos en cuadrantes y delimitados por bordillos de granito, conjunto que permite salvar el desnivel del terreno.
Plaza de la Paja.
La plaza se encuentra en el llamado Madrid de los Austrias, en la antigua morería,
centro histórico de la capital. Es uno de los
rincones más singulares de la época
medieval, en ese Madrid de La
Latina y castizo.
La atraviesa de norte a sur la costanilla de
San Andrés, próxima a la calle de
Segovia, y en ella confluyen diferentes
vías de trazado medieval: por el este desemboca la calle del Príncipe de Anglona y por el oeste las
calles de Alamillo, del
Toro, Alfonso VI y de la Redondilla.
Durante los siglos XIII y el XIV, la plaza fue el gran
mercado de Madrid. Entró en decadencia a partir del siglo XV, cuando el rey Juan II de Castilla ordenó construir la plaza del Arrabal (la plaza Mayor en la actualidad), a donde se desplazó la actividad comercial de la villa.
En su entorno estaban situados diferentes
palacios, de los que sólo se conserva hoy día el Palacio de los Vargas.
La plaza toma este nombre porque en ese lugar se subastaba la paja que se otorgaba a los capellanes de la vecina
capilla del Obispo para el mantenimiento de las mulas que poseían.