Toma su nombre de Diego Velázquez, pintor sevillano afincado en la corte de Felipe IV y que produjo importantes obras —Las Meninas, Las hilanderas y varios retratos de la
familia real, entre otras—, que hoy se conservan en el Prado. Alberga un gran
salón de acogida al público y es la
vía de flujo más importante en el
Museo, pues a través de ella se puede visitar todo el
edificio de Villanueva. El friso sobre la
puerta representa a Fernando VII como protector de las artes y las ciencias, junto a varios dioses de la mitología griega, como Atenea y Apolo.
La
escultura que está frente a la entrada representa a Velázquez, fue construida en 1899 por Aniceto Marinas