Su plantación se data en torno a 1630, el Ahuehuete se disputa el honor de ser el
árbol más antiguo de
Madrid con el gran
Ciprés del
Jardín Botánico. Según cuenta la
tradición popular este árbol se salvó de la tala general que sufrió el
Parque, al instalarse allí el acuartelamiento de las tropas francesas durante la invasión napoleónica, porque su tronco sirvió de apoyo y ocultamiento de una pieza de artillería.