Bueno, pues ya dejalo, parece que has aprendido que con los negocios privados no se juega, enhorabuena y a otra cosa, que la historia de las peñas ya huele.
La peña y la tradicion, una maldicion.
Viva la juventud rebelde que no se adapta, que no se conforma, que lucha por todo y por todos, esa es la juventud autentica y necesaria.
La peña y la tradicion, una maldicion.
Viva la juventud rebelde que no se adapta, que no se conforma, que lucha por todo y por todos, esa es la juventud autentica y necesaria.