Yo, como persona de izquierdas que soy, lo que me preocupa es eso mismo, la izquierda. ¿Tú crees que voy a preocuparme por si Aznar y sus compinches piden perdón o reconocen sus errores?, pues no. Principalmente por no perder el tiempo y secundariamente porque sé de sobra que jamás lo harán.
Yo no he querido decir que la prensa y medios de comunicación en general no tengan poder. ¡ya lo creo que lo tienen!. Lo que yo quise decir, es que no tiene excusa que la izquierda siempre se valga del mismo argumento, porque si alguien entra en contradición, esa es la izquierda.
Si se quieren defender los ideales de la izquierda en un mundo como el que vivimos, hay que aceptar ciertas reglas, algunas de ellas reconozco que repugnantes, pero necesarias para poder hacer llegar el mensaje, que nos comprenda todo el mundo y no nos tenga miedo y crean que los rojos llevamos rabo. Repito, hay que aceptar que los tiempos cambian y aunque eso no quiere decir que nos volvamos, por ejemplo burgueses, si que debemos asimilar que el tablero de juego no es nuestro, que jugamos en campo contrario y que hay que emplear, de vez en cuando y desgraciadamente, las mismas armas que el capital.
La población mundial asimiló que el muro se derribó y la mayoría lo asocia a la caida del comunismo y por consiguiente de los ideales de la izquierda. Por lo tanto, hay que enviar el mensaje dándole la vuelta y hacerlo creible. Hay que hacer entender a la gente que lo que fue derribado no fue una ideología, sino una forma malvada de aplicarla. Es decir, aquí no perdió nada más que el poder y el verdadero ganador fué el capitalismo, con las consecuencias que hoy día estamos conociendo.
Salud, camarada.
Yo no he querido decir que la prensa y medios de comunicación en general no tengan poder. ¡ya lo creo que lo tienen!. Lo que yo quise decir, es que no tiene excusa que la izquierda siempre se valga del mismo argumento, porque si alguien entra en contradición, esa es la izquierda.
Si se quieren defender los ideales de la izquierda en un mundo como el que vivimos, hay que aceptar ciertas reglas, algunas de ellas reconozco que repugnantes, pero necesarias para poder hacer llegar el mensaje, que nos comprenda todo el mundo y no nos tenga miedo y crean que los rojos llevamos rabo. Repito, hay que aceptar que los tiempos cambian y aunque eso no quiere decir que nos volvamos, por ejemplo burgueses, si que debemos asimilar que el tablero de juego no es nuestro, que jugamos en campo contrario y que hay que emplear, de vez en cuando y desgraciadamente, las mismas armas que el capital.
La población mundial asimiló que el muro se derribó y la mayoría lo asocia a la caida del comunismo y por consiguiente de los ideales de la izquierda. Por lo tanto, hay que enviar el mensaje dándole la vuelta y hacerlo creible. Hay que hacer entender a la gente que lo que fue derribado no fue una ideología, sino una forma malvada de aplicarla. Es decir, aquí no perdió nada más que el poder y el verdadero ganador fué el capitalismo, con las consecuencias que hoy día estamos conociendo.
Salud, camarada.