BARCELONA: 2...

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Gracias Finibus.

Ni la moza de la Fuente Seca del Concejo Carcuadiano, ni yo, impúdico duendín insultador y más maligno que el mismísimo maligno, conocíamos este elogio a tan noble y trabajador compañero de fatigas, de ese animal irracional llamado hombre.

Continúo con tu permiso:

Los hombres de este mundo son ingratos,
el hombre es de perverso natural;
esa invención que llaman 'garabatos'
es invención infame, criminal;
¡Cuántos te proporciona malos ratos
el hombre vil con su invención fatal!
Por eso, aunque de horror me despeluzno,
disculpo tu fatídico rebuzno.

Pero no quiero seguir adelante, sin antes decirle a la mocita degollada y manca que se erige todavía altanera sobre las ruinas de lo que fue un lindo y florido jardín, que tenga mucho cuidado estos días porque, puede ser que se deje influenciar por los adornos de colorines y llamitas irisadas, que tanto abundan empujando al consumo por consumir, o que..., se eleve su pesada anatomía moldeada por las hábiles manos del artista, al escuchar los dulces cantos de sirena y le de; uno de esos arrebatos de solidaridad que pasan tan fugaces como pasan las estaciones año tras año, quedando así, invadida para siempre por el malvado gusano de la hipocresía.

Y sin embargo.....

Un religioso dijo a una ramera: 'Estás ebria,
atrapada a cada momento en una nueva trampa'
Ella respondió: 'Oh, Señor, yo soy lo que tú dices,
y tú, ¿eres lo que aparentas?'

Pero dejando todo esto a un lado porque es muy complicado para unos tarros como el nuestro, moza; bueno, el tuyo no, porque tú estás destarrada, de lo que quería hablarte de verdad, es de la cumbre de Copenhague, a la que, supongo, que terminarán haciendo el mismo caso que el que hicieron a la de Kioto y a otras anteriores. ¡Ojalá me equivoque! Pero el caso es distraer al personal; pan y circo, pero sin pan. Palabras que el viento lleva mientras que Nobel, si reviviera, se moría otra vez, o del susto o de vergüenza, al ver, cómo le dan un premio a quienes tienen por lema eso de: si quieres la paz, haz la guerra, “preventiva”, claro está. O cómo los cátaros, se dedican a hacer leyes prohibitivas relativas al obsoleto y casposo ya, a mi parecer, negocio de los cornúpetas. Cuando por esos y estos pagos, la gente normal tiene otras preocupaciones más perentorias ocupando el primer lugar entre sus preocupaciones.

Salud.