U asegura que es «un chollo» ser alcalde en algunos ayuntamientos
Denuncia supuestas irregularidades en las elecciones municipales celebradas en Rosinos de la Requejada
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Francisco Molina, diputado de IU.
Foto L. O. Z.
MULTIMEDIA
Fotos de la noticia
A. S. El diputado provincial de Izquierda Unidad, Francisco Molina, denunció ayer «el miedo fundado» que existe en algunos pueblos de la comarca de Sanabria-Carballeda a la hora de elegir a los representantes en los comicios electorales, centrándose especialmente en el municipio de Rosinos de la Requejada.
Primeramente recordó la contratación de una persona que ejerce como administrativa en tres ayuntamientos y otra que lo hace como secretaria en dos y en otro como administrativa, caso éste que fue resuelto tras la denuncia de IU.
Molina repara en la hija del diputado popular de Sanabria y alcalde de Rosinos, Ángel Prada, ejerce de secretaria tanto en Rosinos como en Palacios, «lo que parece ser legal», y dice que «ella misma solicitó la productividad en Rosinos «por el especial rendimiento, así como dedicación extraordinaria y el interés e iniciativa con que desempeña el puesto de trabajo».
Pero el diputado de IU va más allá y alude a que el alcalde de Rosinos «sabía quién le votaba y quién no», porque «el clan del alcalde reparte, por familias, papeletas de voto practicando eso que en los pueblos se llama "hacer cocina" e insistiendo en que hay que votarle con esas papeletas y no otras». Se refiere Molina a «papeletas marcadas (con un ejemplo), que además no se destruyen, como marca la Ley y que quedan en el Ayuntamiento, que es donde está la mesa para votar».
Hace mención a que en las últimas elecciones municipales se descubrió «el truco de las papeletas marcadas» y fue la razón por la que la Junta Electoral anunció por fax que una comisión se trasladaría al cierre de las urnas «para comprobar las incidencias».
El diputado de IU señal que «el fax lo recibe la secretaria del Ayuntamiento, que es la hija del alcalde», y apunta las sospechas de que este aviso «obligó al clan del mandatario a descambiar a la carrera todas las papeletas que pudo, a lo largo del día». Sin embargo, precisa, «en el recuento de los votos aparecieron 66 papeletas marcadas, todas a favor del PP». Francisco Molina alude a estas prácticas para sostener que existe todavía «un miedo fundado» en los pueblos a la hora de elegir a los representantes, y afirma que «mantener las cuotas de poder que dan las alcaldías en un chollo en determinados ayuntamientos».
Denuncia supuestas irregularidades en las elecciones municipales celebradas en Rosinos de la Requejada
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Francisco Molina, diputado de IU.
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A. S. El diputado provincial de Izquierda Unidad, Francisco Molina, denunció ayer «el miedo fundado» que existe en algunos pueblos de la comarca de Sanabria-Carballeda a la hora de elegir a los representantes en los comicios electorales, centrándose especialmente en el municipio de Rosinos de la Requejada.
Primeramente recordó la contratación de una persona que ejerce como administrativa en tres ayuntamientos y otra que lo hace como secretaria en dos y en otro como administrativa, caso éste que fue resuelto tras la denuncia de IU.
Molina repara en la hija del diputado popular de Sanabria y alcalde de Rosinos, Ángel Prada, ejerce de secretaria tanto en Rosinos como en Palacios, «lo que parece ser legal», y dice que «ella misma solicitó la productividad en Rosinos «por el especial rendimiento, así como dedicación extraordinaria y el interés e iniciativa con que desempeña el puesto de trabajo».
Pero el diputado de IU va más allá y alude a que el alcalde de Rosinos «sabía quién le votaba y quién no», porque «el clan del alcalde reparte, por familias, papeletas de voto practicando eso que en los pueblos se llama "hacer cocina" e insistiendo en que hay que votarle con esas papeletas y no otras». Se refiere Molina a «papeletas marcadas (con un ejemplo), que además no se destruyen, como marca la Ley y que quedan en el Ayuntamiento, que es donde está la mesa para votar».
Hace mención a que en las últimas elecciones municipales se descubrió «el truco de las papeletas marcadas» y fue la razón por la que la Junta Electoral anunció por fax que una comisión se trasladaría al cierre de las urnas «para comprobar las incidencias».
El diputado de IU señal que «el fax lo recibe la secretaria del Ayuntamiento, que es la hija del alcalde», y apunta las sospechas de que este aviso «obligó al clan del mandatario a descambiar a la carrera todas las papeletas que pudo, a lo largo del día». Sin embargo, precisa, «en el recuento de los votos aparecieron 66 papeletas marcadas, todas a favor del PP». Francisco Molina alude a estas prácticas para sostener que existe todavía «un miedo fundado» en los pueblos a la hora de elegir a los representantes, y afirma que «mantener las cuotas de poder que dan las alcaldías en un chollo en determinados ayuntamientos».