Portillo de la Traición", hoy puerta de la Lealtad, ZAMORA

Fernando I, en su lecho de muerte, repartió sus reinos entre sus hijos: a García le entregó Galicia, a Sancho II Castilla y a Alfonso VI León. Sancho II trató de reunificar los tres territorios, pero en 1072, la nobleza leonesa se reunió en Zamora en torno a la infanta Doña Urraca, en un intento desesperado de seguir manteniendo su independencia e identidad. Sancho II, tras haber derrotado a García y a Alfonso VI, sólo necesitaba tomar la ciudad de Zamora para lograr la reunificación. Pero la ciudad resistió un duro asedio durante siete meses. El Cerco a la ciudad finalizó el 7 de octubre de ese año, cuando Bellido Dolfos, que había salido de Zamora y se había ganado la confianza del rey, le dio muerte con el venablo del propio rey. Bellido regresó a la ciudad perseguido por el Cid, entrando por el tradicionalmente llamado "Portillo de la Traición", hoy puerta de la Lealtad..