Hola a todos, foreros, forenses y foristas (nominativos todos válidos para referirse a las personas que por aquí nos comunicamos).
Hoy quiero hablar de la fiesta de nuestro pueblo y dejar un poquito el tema de la calle, las verjas, las líneas de alta y otro tema del que todavía no se ha hablado aquí pero cuando me entere bien ya os explicare sobre una segregación en el monte mejor dicho en la sierra donde hay unos siete aerogeneradores que la junta vecinal de nuestro pueblo quiere hacer no sé muy bien porque ni para qué.
El día seis de junio domingo y el día siete lunes, se hubiese celebrado, si hubiese habido aforo la fiesta de Corpus en nuestro Padornelo.
Ante este acontecimiento llevaba emparejado mucho trajín sobre todo por parte de las mujeres (que raro) que tenía que ponerse ocho días antes a prepararlo todo. Lo primero era procurar para todos los miembros de la familia vestidos y zapatos nuevos. Se compraban las telas y con los figurines que eran las revistas de moda entonces se sacaban los modelitos que mi madre cortaba y cosía para todos nosotros. A estos vestidos, faldas o blusas se le dejaba tela abundante en las costuras y bastillas ya que serían las ropas que después al verano siguiente se pondrían a diario y como crecíamos había que sacarles en las costuras. Se encalaban las casas y se fregaban muy bien los suelos (limpieza general para sacudir la morriña invernal). La víspera del día señalado se juntaban las mujeres en los hornos para hacer los roscones, con sus calderos de cinc, los batidores el azúcar, las tarteras para separar las yemas de las claras (que había que batir muy bien para que quedasen a punto de nieve) después se juntaban las claras con las yemas se ponía el azúcar, la harina y a las formas y para el horno donde al poco rato salían unos aromas dignos de la mejor repostería mundial. Ahora para los niños llegaba el momento más esperado que era rebañar el caldero donde se había hecho la masa del roscón, y como estaba aquello de bueno, ¿qué me decís?. A que sabía a gloria. Mientras tanto los hombres ya habían preparado la carne para hacer el guiso, que se ponía en un sitio fresquito y tapada con un saco de lino para que las moscas no tomaran lo que no era suyo. Y los mozos del pueblo ya se habían encargado de la música para darle al bullarengue, la habían contratado a su gusto y ellos eran los encargados de correr con los gastos.
Domingo por la mañana, las campanas tocaban a alegría y eso mismo era lo que yo sentía lo que decían las campanas FELICIDAD. Íbamos a misa y se hacia una procesión por todo el pueblo que estaba engalanado con colchas (las más bonitas de las casas) en ventanas y balcones, las calles estaban barridas y al paso del Santísimo bajo el Palio se iban echando flores que se habían recogido en el monte sobre todo de xestas y cada cierto tiempo había un altar donde se posaba el Altísimo y se adoraba, después de vuelta a la iglesia todos fuera y a bailar un rato con la música, a casa a comer y por las tarde juego de bolos, mas música, cena otra vez baile y a la cama. El lunes la misa se decía en recuerdo de todos los difuntos del pueblo y el día transcurría igual que el anterior. Solo que yo cuando se iba acabando el día tenía un sentimiento entre alegre y triste porque la fiesta se terminaba.
Este recuerdo de la Fiesta de Padornelo en Honor al Corpus Cristi, os lo dedico a todos vosotros, xente padorneleira, a todos los que se fueron allende los mares para buscar una vida mejor para ellos y sus familias, a Argentina, Cuba, Colombia,… a los que se fueron también a otras zonas de España y a todos nuestros antepasados que nacieron, vivieron, trabajaron, amaron, rieron…. en nuestro Padornelo.
Que vuestro corazón este lleno de felicidad y vuestro cuerpo de salud.
Un beso a todos los, foreros, forenses, foristas.
Hoy quiero hablar de la fiesta de nuestro pueblo y dejar un poquito el tema de la calle, las verjas, las líneas de alta y otro tema del que todavía no se ha hablado aquí pero cuando me entere bien ya os explicare sobre una segregación en el monte mejor dicho en la sierra donde hay unos siete aerogeneradores que la junta vecinal de nuestro pueblo quiere hacer no sé muy bien porque ni para qué.
El día seis de junio domingo y el día siete lunes, se hubiese celebrado, si hubiese habido aforo la fiesta de Corpus en nuestro Padornelo.
Ante este acontecimiento llevaba emparejado mucho trajín sobre todo por parte de las mujeres (que raro) que tenía que ponerse ocho días antes a prepararlo todo. Lo primero era procurar para todos los miembros de la familia vestidos y zapatos nuevos. Se compraban las telas y con los figurines que eran las revistas de moda entonces se sacaban los modelitos que mi madre cortaba y cosía para todos nosotros. A estos vestidos, faldas o blusas se le dejaba tela abundante en las costuras y bastillas ya que serían las ropas que después al verano siguiente se pondrían a diario y como crecíamos había que sacarles en las costuras. Se encalaban las casas y se fregaban muy bien los suelos (limpieza general para sacudir la morriña invernal). La víspera del día señalado se juntaban las mujeres en los hornos para hacer los roscones, con sus calderos de cinc, los batidores el azúcar, las tarteras para separar las yemas de las claras (que había que batir muy bien para que quedasen a punto de nieve) después se juntaban las claras con las yemas se ponía el azúcar, la harina y a las formas y para el horno donde al poco rato salían unos aromas dignos de la mejor repostería mundial. Ahora para los niños llegaba el momento más esperado que era rebañar el caldero donde se había hecho la masa del roscón, y como estaba aquello de bueno, ¿qué me decís?. A que sabía a gloria. Mientras tanto los hombres ya habían preparado la carne para hacer el guiso, que se ponía en un sitio fresquito y tapada con un saco de lino para que las moscas no tomaran lo que no era suyo. Y los mozos del pueblo ya se habían encargado de la música para darle al bullarengue, la habían contratado a su gusto y ellos eran los encargados de correr con los gastos.
Domingo por la mañana, las campanas tocaban a alegría y eso mismo era lo que yo sentía lo que decían las campanas FELICIDAD. Íbamos a misa y se hacia una procesión por todo el pueblo que estaba engalanado con colchas (las más bonitas de las casas) en ventanas y balcones, las calles estaban barridas y al paso del Santísimo bajo el Palio se iban echando flores que se habían recogido en el monte sobre todo de xestas y cada cierto tiempo había un altar donde se posaba el Altísimo y se adoraba, después de vuelta a la iglesia todos fuera y a bailar un rato con la música, a casa a comer y por las tarde juego de bolos, mas música, cena otra vez baile y a la cama. El lunes la misa se decía en recuerdo de todos los difuntos del pueblo y el día transcurría igual que el anterior. Solo que yo cuando se iba acabando el día tenía un sentimiento entre alegre y triste porque la fiesta se terminaba.
Este recuerdo de la Fiesta de Padornelo en Honor al Corpus Cristi, os lo dedico a todos vosotros, xente padorneleira, a todos los que se fueron allende los mares para buscar una vida mejor para ellos y sus familias, a Argentina, Cuba, Colombia,… a los que se fueron también a otras zonas de España y a todos nuestros antepasados que nacieron, vivieron, trabajaron, amaron, rieron…. en nuestro Padornelo.
Que vuestro corazón este lleno de felicidad y vuestro cuerpo de salud.
Un beso a todos los, foreros, forenses, foristas.