Crónicas de una letra minúscula.
52. Una pagaba yo y otra no sé sí tú.
Una noche en Madrid, coincidimos Miguel y yo de copas, no sé cual sería el motivo, resulta y sucede como decía Manolo el Sastre, q. e. p. d., que empezamos, por una chupitería, que rezaba como “La Chupitería de Madrid”, donde se preciaban de tener, chupitos de todo tipo.
Le había avisado a Miguel, que allí había de todo, como en botica, ya en la barra, Miguel lo pidió de “Labrestos”, a lo que el camarero respondió que de eso no tenemos.
Y Miguel dirigiéndose a mí:
- ¿No decías que aquí había chupitos de todo tipo?.
Continuamos por la zona de Huertas, ya a cubatas, y después de llevar varios en el coleto entramos en uno que se llamaba “Tuberias”, estaba atacañáo de gente, a medio cubata bebido, a Miguel le entran ganas de aliviar la vejiga (cuídatela que ya ha salido en varios cascarrillos tu vejiga), y se va a las “necesarias” a evacuar, cuando vuelve, yo ya había dado cuenta de mi cubata, y él hizo lo propio con el suyo. Como yo había pagado en el anterior cubil visitado, y veía que no pagaba, le dije claramente, venga paga y vámonos a otro.
Me contesta.
- ¿Pero tu has pagado algún cubata?
Le digo claro, yo voy pagando en un bar si, y entro no, como mandan los cánones.
- Pues yo no he pagado ninguno, aquí en Madrid, cuando están los Pub atacañáos de gentío no se paga nunca hombre.
Pues no vamos a discutir por eso, con uno que lo diga vasta.
Así continuamos el resto de la noche.
Y recuerdo en uno de los últimos que entramos, estaban cerrando, y uno en la puerta no nos quería dejar entrar, tanto le dimos la paliza, diciéndole, que no tardamos nada, que los bebíamos en cinco minutos; discutiendo con él entramos, pedimos los cubatas en la barra al lado de la puerta, y él, el del Pub, erre que erre, siguió con el ergo, sin separarse de nosotros ni un momento, total que en un plis plas bebimos los cubatas, y él seguía dándonos la monserga. Salimos diciéndole, ves como no hemos tardado nada, “pesao”, la barrila que nos has dado, y por supuesto sin pagar los cubatas.
Salud.
52. Una pagaba yo y otra no sé sí tú.
Una noche en Madrid, coincidimos Miguel y yo de copas, no sé cual sería el motivo, resulta y sucede como decía Manolo el Sastre, q. e. p. d., que empezamos, por una chupitería, que rezaba como “La Chupitería de Madrid”, donde se preciaban de tener, chupitos de todo tipo.
Le había avisado a Miguel, que allí había de todo, como en botica, ya en la barra, Miguel lo pidió de “Labrestos”, a lo que el camarero respondió que de eso no tenemos.
Y Miguel dirigiéndose a mí:
- ¿No decías que aquí había chupitos de todo tipo?.
Continuamos por la zona de Huertas, ya a cubatas, y después de llevar varios en el coleto entramos en uno que se llamaba “Tuberias”, estaba atacañáo de gente, a medio cubata bebido, a Miguel le entran ganas de aliviar la vejiga (cuídatela que ya ha salido en varios cascarrillos tu vejiga), y se va a las “necesarias” a evacuar, cuando vuelve, yo ya había dado cuenta de mi cubata, y él hizo lo propio con el suyo. Como yo había pagado en el anterior cubil visitado, y veía que no pagaba, le dije claramente, venga paga y vámonos a otro.
Me contesta.
- ¿Pero tu has pagado algún cubata?
Le digo claro, yo voy pagando en un bar si, y entro no, como mandan los cánones.
- Pues yo no he pagado ninguno, aquí en Madrid, cuando están los Pub atacañáos de gentío no se paga nunca hombre.
Pues no vamos a discutir por eso, con uno que lo diga vasta.
Así continuamos el resto de la noche.
Y recuerdo en uno de los últimos que entramos, estaban cerrando, y uno en la puerta no nos quería dejar entrar, tanto le dimos la paliza, diciéndole, que no tardamos nada, que los bebíamos en cinco minutos; discutiendo con él entramos, pedimos los cubatas en la barra al lado de la puerta, y él, el del Pub, erre que erre, siguió con el ergo, sin separarse de nosotros ni un momento, total que en un plis plas bebimos los cubatas, y él seguía dándonos la monserga. Salimos diciéndole, ves como no hemos tardado nada, “pesao”, la barrila que nos has dado, y por supuesto sin pagar los cubatas.
Salud.