Crónicas de una letra minúscula.
De lo que sucedió un día de Santa Rita
Entonces se celebraban más fiestas, debido a una mayor devoción que había a los santos. El día 22 de Mayo se celebraba la fiesta de Santa Rita (posible abreviatura de Margarita), muchas mujeres de Malva, se levantaban antes del amanecer, y de noche andando se dirigían a Toro, para poder llegar a la iglesia de Santa Rita, y así celebrar por la mañana la santa eucaristía, con la patrona de los imposibles, de los funcionarios locales, de los problemas maritales y de las abejas blancas.
Es Santa Rita una de las santas con más devoción del santoral, casada y maltratada por su marido, que al final arrepentido se convierte al cristianismo, antes de ser asesinado. Tuvo dos hijos (unos dicen que fueron gemelos y otros que no), los cuales murieron de una peste contagiosa, cuando empezaban a tramar la venganza de su padre.
La santa dio gracias a Dios, por evitar de esa forma, más derramamiento de sangre.
En aquellos tiempos cuentan que en Malva había una mujer a la que mucha gente consideraba bruja. Y uno de esos días 22 de Mayo, que se encaminaban las mujeres a Toro, esta mujer, de repente desapareció del grupo de mujeres, a la salida del pueblo, por la cuesta de patinas, un poco antes de llegar a los tomillares, a la vez que apareció un gato negro, que acompañaría a la comitiva todo el camino hasta la iglesia de Toro, allí desapareció el gato negro y volvieron a ver a la mujer junto con las demás dentro de la iglesia antes de que empezara la misa. De la mujer no me atrevo a decir su nombre, pues todavía vive una nieta en Malva. Lo dejo así por si alguien quiere investigar.
Y nosotros decíamos de pequeños: “Santa Rita, Rita, lo que se da no se quita”.
Salud.
De lo que sucedió un día de Santa Rita
Entonces se celebraban más fiestas, debido a una mayor devoción que había a los santos. El día 22 de Mayo se celebraba la fiesta de Santa Rita (posible abreviatura de Margarita), muchas mujeres de Malva, se levantaban antes del amanecer, y de noche andando se dirigían a Toro, para poder llegar a la iglesia de Santa Rita, y así celebrar por la mañana la santa eucaristía, con la patrona de los imposibles, de los funcionarios locales, de los problemas maritales y de las abejas blancas.
Es Santa Rita una de las santas con más devoción del santoral, casada y maltratada por su marido, que al final arrepentido se convierte al cristianismo, antes de ser asesinado. Tuvo dos hijos (unos dicen que fueron gemelos y otros que no), los cuales murieron de una peste contagiosa, cuando empezaban a tramar la venganza de su padre.
La santa dio gracias a Dios, por evitar de esa forma, más derramamiento de sangre.
En aquellos tiempos cuentan que en Malva había una mujer a la que mucha gente consideraba bruja. Y uno de esos días 22 de Mayo, que se encaminaban las mujeres a Toro, esta mujer, de repente desapareció del grupo de mujeres, a la salida del pueblo, por la cuesta de patinas, un poco antes de llegar a los tomillares, a la vez que apareció un gato negro, que acompañaría a la comitiva todo el camino hasta la iglesia de Toro, allí desapareció el gato negro y volvieron a ver a la mujer junto con las demás dentro de la iglesia antes de que empezara la misa. De la mujer no me atrevo a decir su nombre, pues todavía vive una nieta en Malva. Lo dejo así por si alguien quiere investigar.
Y nosotros decíamos de pequeños: “Santa Rita, Rita, lo que se da no se quita”.
Salud.