3 meses GRATIS

MALVA: En esas disquisiciones, se iban aproximando hacia nuestra...

En esas disquisiciones, se iban aproximando hacia nuestra mesa, al tiempo que Miguel miraba por el rabillo del ojo, esperando que llegaran a su altura. Cuando pasaron por detrás de su silla, se volvió hacia ellas y les gritó bien alto y claro, haciendo que todas las miradas de la sala se dirigieran hacia ellas y dejando helados al que cantaba los números y, por supuesto, a nosotros:
- ¡Guarras!.
Las señoras pasaron tal vergüenza que dejaron de tachar números para no tener que cantar ni línea, ni bingo, ni ¡leches!.