Corazón sano.
Seguir una dieta mediterránea enriquecida con 30 gramos de frutos secos, al menos la mitad de ellos nueces, reduce en un 30 % el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares y, concretamente, disminuye en un 49 % la posibilidad de sufrir un ictus o accidente vascular cerebral, tal y como se desprende de una investigación española que se acaba de publicar en The New England Journal of Medicine.
Seguir una dieta mediterránea enriquecida con 30 gramos de frutos secos, al menos la mitad de ellos nueces, reduce en un 30 % el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares y, concretamente, disminuye en un 49 % la posibilidad de sufrir un ictus o accidente vascular cerebral, tal y como se desprende de una investigación española que se acaba de publicar en The New England Journal of Medicine.