Por lo general la gente no nos hace caso ninguno hasta que va siendo mayor. No es que noten nuestra presencia, pero como han oído hablar mucho de nosotros a otras personas, se mosquean cosa mala. Y con razón porque hay algunos que no tiemblan: lo mismo les da desayunarse todos los días con chacina, que apretarse, todas las tardes, un par de cubatas a lo tonto y a lo bobo. ¿”Ande” van a parar?
Mensaje
Me gusta
No