Crónicas de una letra minúscula.
La habitación azul.
Era la preferida para estar enfermo, malo como decíamos, en ella pasé varias gripes, desde ella vi pasar el cortejo obispal para la confirmación y a mí me pillo con el sarampión, bueno me pilló en la alcoba, y me trasladó mi madre arropado en una colcha roja, por prescripción del médico, a la colcha roja me refiero con lo de la prescripción.
También era la más aparente para recibir las visitas del médico, de Don Mariano el practicante o de quien fuera a verte.
La habitación azul.
Era la preferida para estar enfermo, malo como decíamos, en ella pasé varias gripes, desde ella vi pasar el cortejo obispal para la confirmación y a mí me pillo con el sarampión, bueno me pilló en la alcoba, y me trasladó mi madre arropado en una colcha roja, por prescripción del médico, a la colcha roja me refiero con lo de la prescripción.
También era la más aparente para recibir las visitas del médico, de Don Mariano el practicante o de quien fuera a verte.