Compramos energía a futuro

MALVA: Tachuela 59...

Tachuela 59

“Las mocitas de este pueblo
gastan dos pares de medias
para que digan los mozos
que gordas tienen las piernas”

Cuando los hombres subían en los carros los costales de trigo, y los llevaban de la era a la panera, se tumbaban encima y cantaban:

“Las amas de los curas, son apretadas,
como las cerraduras de las ventanas.

Y cuando recolectaban y llevaban el trigo a las paneras (edificio destinado a guardar el grano) cantaban melodías:

“ ¡Qué polvorera madre! se ha levantado,
que hasta los arbolitos, se han deshojado.
Se han deshojado, madre se han deshojado.

Pólvora, perdigones,
tiros y cohetes,
lleva la mi morena en el rodete.

Pólvora, perdigones,
tiros y balas,
lleva la mi morena en las enaguas”

y otra más triste:

“Aullaba un perro madre,
junto a una puerta,
antes que aclare el alba,
ya estaré muerta.

Vendrán todas a verme después de muerta,
menos Dolores,
a poner en mi caja cintas y flores
Madre si muero,
sin tu cinta y tu beso,
pasar no quiero.

Si viene Juan a verme,
después de muerta,
no lo dejéis que pase
de aquella puerta
no crea que de muerta lo quiero
cuando me vea.

Que ame a Dolores,
que a mí sólo me basta,
que tu me llores.

Quién peinará amorosa,
Tus dulces canas,
sentada al sol contigo,
por las mañanas

Quién hasta la tarde,
sentada esté contigo
bajo el castaño,
sentada al sol contigo, por todo un año
años enteros, tan sólo mis recuerdos,
por compañero.

Se siente un ruido madre
los rondadores, que es sábado y cortejan,
los mis amores
Ay madre mía el pérfido juraba
que me quería