Restos de la torre de la capilla. JMG, MALVA

Era lo mismo que ir a los melonares. Si alguien te decía: Vete y comete un melón o una sandía. Pues no. Estaban mejor los que estaban vigilados.
Pues yo creo que nosotros nos bañabamos en las buchinas solo por hacer algo prohíbido. Le daba más emoción. Con permiso del dueño no tenía gracia.
Pues a mí el agua de siempre me ha gustado mucho. Siempre andábamos peregrinando por las buchinas para bañarnos, hasta hemos ido a Belver en bici al Valderaduey a bañarnos, que no nos llegaba a las rodillas.
Me imagino con qué vestimentas irían a misa a esta iglesia cuando estaba en pie, con velo seguro
Es verdad que otros insectos volando llegan a todos los sitios
Loly.