Bueno lo voy a ir dejando, que es viernes, y ponen una oreja en salsa en el Mesón Jara, que tiembla el misterio.
no seas cruel, esas cosas no se pueden nombrar a estas horas que se me hace la boca agua, que la disfrutes
Encima, va la fata de ella y, hoy, madruga. ¿Te pa ti la bobada?
Bueno lo voy a ir dejando, que es viernes, y ponen una oreja en salsa en el Mesón Jara, que tiembla el misterio.
Hablando de fotos: os recuerdo que si alguien tiene alguna foto de los disfraces de 1988, de cuando los Zachos hicimos el entierro de la Sabrina, os agradecería que me la prestaráis.
Hola Begoña, que andaba enfrascao con los chascarrillos y no caía que estabas por ahí.
- ¡Esta es la mía!, pensó. ¡Ahora me fumo un cigarro como la pata un perro! ¡Verás qué rico!.
Nada más chiscarlo, Ramiro, que el hombre estaba en el tejado al rechisol, gritó:
- ¡A ver ese cemento!
Ante tal urgencia, Piorno no anduvo con músicas celestiales, guardó el cigarro, que acababa de encender, en el bolsillo de la camisa, flexionó las rodillas hasta alcanzar el carretillo y, con las manos bien ocupadas en él, arrancó derecho a la obra, como si tal cosa.
Al paso que les dejaban ir los riñones, y el vino que, de vez en cuando entremetían, andaban los maestros, cada uno a lo suyo. Uno en el tejado, otro dando un plano y el tercero, que estaría en la bodega. Piorno se acercó, con el carretillo a la vera de una gran masa de cemento, cargó el carretillo, en previsión de posibles urgencias y clavó la pala en la masa, satisfecho de cómo le rodaban las cosas.
El caso es que, hace ya muchos años, se construyó, con ayuda de amigos como Pruden (q. e. p. d.), Ramiro y Daniel (hace mucho que no sé de él) una casa, en una parcela de Villamayor, a la que vino a bautizar “Garigolo”. La iban haciendo los ratos libres, a base de merendolas y filas de ladrillos. Un día ponían una fila, otro día, dos; un día dejaban lista una aldaba, otro, una falleba, y así iban poco a poco, ganando cada vez más sombra.
Por cierto JMG, he estado buscando y he encontrado fotos del rayo verde, en las playas de Cádiz.
Gracias por los piropos, pero aquí el que tira del carro es JMG, que nos tiene picaos.
Ya te digo.
Gracias por los piropos, pero aquí el que tira del carro es JMG, que nos tiene picaos.
Nada más coger la postura, en cuclillas a media altura para evitar picarnos con las pajas, mientras PON esperaba los forceps para ayudar en su parto, la criatura mía, salió con la prisa que venían anunciando los retortijones del camino y con tal estruendo y profusión aspersora que PON no pudo por menos de exclamar:
-“ ¡Hostia, hoy le has metido el turmix!”
Heli, esta, es muy buena y no la teniamos incluida, tomo nota.
Nada más coger la postura, en cuclillas a media altura para evitar picarnos con las pajas, mientras PON esperaba los forceps para ayudar en su parto, la criatura mía, salió con la prisa que venían anunciando los retortijones del camino y con tal estruendo y profusión aspersora que PON no pudo por menos de exclamar:
-“ ¡Hostia, hoy le has metido el turmix!”
Dios que bueno ¡msol tienes razón es un poeta de los pies a la cabeza, aunque sea para ir al notario
Nada más coger la postura, en cuclillas a media altura para evitar picarnos con las pajas, mientras PON esperaba los forceps para ayudar en su parto, la criatura mía, salió con la prisa que venían anunciando los retortijones del camino y con tal estruendo y profusión aspersora que PON no pudo por menos de exclamar:
-“ ¡Hostia, hoy le has metido el turmix!”
En la peña Los Zachos tenemos la sana costumbre de que, al terminar de cenar, a PON y a mi nos entren los más saludables apretones que puedan provocar las ricas viandas que acabamos de engullir. Así que, mientras el resto de peñistas se sirven sus cafés y sus copitas, nos ausentamos unos momentos con el fin de hacer sitio, él para el sol y sombra y la faria, y yo para el cubata de rigor.