CASTROVERDE DE CAMPOS: TIERRA DE CAMPOS:: HISTORIA Y ARTE DE SAN ZOILO. CARRIÓN...

TIERRA DE CAMPOS:: HISTORIA Y ARTE DE SAN ZOILO. CARRIÓN DE LOS CONDES. PÀGINA Nº 6CAPITEL ROMÁNICO DEL MURO SUR. Por último, en el interior de la iglesia queda un capitel románico semioculto en el muro sur que puede pasar desapercibido a pesar de que se ha dirigido un foco luminoso para señalizarlo. Hay varios personajes y animales, Lo más evidente es que una persona mete sus manos en las comisuras de la boca de un león. Conviene mencionar también sobre la IGLESIA ROMÀNICA, que se han identificado un total de ciento siete marcas de cantería (marcas esculpidas por los canteros que a través de su estudio permiten conocer muchos detalles sobre los constructores anónimos de los templos) de treinta y tres tipos diferentes distribuidas por los muros del templo. EL CONJUNTO DE SEPULCRO MEDIEVALES. En el interior de la iglesia, en lo alto del presbiterio, en un arcosolio, descansan los restos de de la condesa Doña Teresa (siglo XI). A los pies de la iglesia podemos observar una espléndida colección de sarcófagos de la familia Beni Gómez. Los más antiguos, lisos, datan de finales del siglo XI - comienzos del siglo XII. El resto datan de mediados del siglo XIII y presentan decoración, con escenas labradas del Calvario, la Anunciación o la Epifanía, entre otras. De entre los sarcófagos, tenemos que destacar el de Fernando Malgradinense, yerno de Alfonso VI y señor de Benavente. También se localizan en el templo los sepulcros de la condesa Teresa Sancha y de su marido el conde Gómez Díaz, de sus ocho hijos. BIENES MUEBLES DE LA IGLESIA BARROCA. Tenemos que destacar también el retablo principal. Si bien no es el original del monasterio, ya que no se ha conservado, es una pieza de estilo renacentista dedicada a la Asunción de Nuestra Señora. Data de mediados del siglo XVII y proviene de BAQUERÍN DE CAMPOS. Del retablo destacan los relieves laterales, que han sido atribuidos a un seguidor de la escuela de Gregorio Fernández y que están dedicados a escenas de la Virgen. El retablo está rematado por un calvario formado por tallas de más de dos metros de altura que se atribuyen al escultor Antonio de Ribera y en las que se representan a los cuatro Santos Padres de la Iglesia: San Jerónimo, San Ambrosio, San Gregorio y San Agustín. Escondido junto al retablo y dentro de una urna plateada datada en el siglo XVIII, encontramos las reliquias del SAN ZOILO. No podemos olvidarnos del órgano, situado sobre la puerta de acceso de la fachada principal, se trata de un órgano barroco castellano con cadeneta, ejemplo muy escaso dentro de este tipo de piezas. Finalmente, conviene mencionar tres piezas. En primer lugar, en la sacristía se localiza un cuadro que representa el Martirio de SAN ZOILO y, en el centro, se exhiben dos telas islámicas denominadas "Manto del Conde y de la Condesa", datados por los investigadores en el siglo XI y que fueron extraídas en el año 2003 del interior de una arqueta funeraria del siglo XVIII junto al Retablo Mayor, que alojaba las reliquias de SAN ZOILO (la arqueta original, en marfil policromada, y datada en el siglo X, se localiza en el Museo Arqueológico Nacional). TIERRA DE CAMPOS:: HISTORIA Y ARTE DE SAN ZOILO. CARRIÓN DE LOS CONDES. PÀGINA Nº 7Estas dos telas fueron DECLARADAS  EN EL AÑO 2012 BIC  (Bien de Interés Cultural) con categoría de bien Mueble y parece que ser que llegaron desde CÓRDOBA junto con las reliquias de SAN ZOILO y de otros santos como regalo de los reyes árabes a los INFANTES DE CARRIÓN. Estas telas, son de una exquisita calidad. La azul, se conserva íntegramente (tiene más de 2 metros de largo) y combina motivos sasánidas y bizantinos. El segundo, también completo, es más pequeño, de color rojo, presenta una serie de medallones con hileras de aves enfrentadas por la espalda. Como dato curioso, cabe mencionar que esta tela conserva los dos orillos (remates originales de los tejidos), que nos indica que la pieza está completa.

EL CLAUSTRO. El claustro principal del monasterio es de estilo PLATERESCO y es uno de los elementos de mayor interés artístico, ya que se considera una maravilla de ESTILO GÓTICO-RENACENTISTA ÚNICA EN EUROPA. Se trata de un claustro de dos plantas con un jardín en cuyo centro se localiza un pozo con lavamanos al que se accede por la apertura del muro frente al refectorio (comedor del monasterio). Se sabe que este claustro sustituyó a uno anterior, románico, que posiblemente sería de dimensiones más reducidas, pero se desconoce la fecha de construcción (el único dato que se tiene es que en el año 1292 estaba en buen estado). Algunos autores apunten a que quizás la construcción del claustro original medieval dataría del siglo XI. Gracias a las obras de remodelación y restauración para la adecuación del monasterio como complejo hotelero, se ha podido obtener más información sobre este claustro primigenio. El claustro actual (la planta inferior) fue proyectado por Juan de Badajoz el Mozo en 1537 por encargo del abad Gaspar de Villarroel, pero las obras no se concluyeron hasta el año 1577, ya que los trabajos fueron suspendidos durante varios años por falta de fondos. Tiene treinta y tres metros de lado, cinco de ancho y siete de alto; está compuesto de arcos ojivales. La bóveda de esta zona está dedicada a los infantes de Carrión, que son considerados sus fundadores. Así, en cada galería se abren cinco arcos ojivales que reposan en sendas pilastras, con un friso de formas platerescas. En total encontramos veinticuatro tramos, cada uno de ellos con su correspondiente bóveda y una amplia imposta labrada que recorre todo el muro. En esta importa se localizan una serie de ménsulas historiadas, adornadas con relieves escultóricos de donde arrancan los nervios que forman las bóvedas de crucería con los terceletes resaltados. En cada una de las veinticuatro bóvedas, los nervios que arrancan de las pilastras forman un cuadrado en cuyo centro se localiza la clave principal, con un medallón esculpido. De los vértices de dicho cuadrado otras cuatro claves con sendos medallones. Los espacios de los cuadrados, los terceletes y el resto de la bóveda están decorados con jarrones, escudos. Destacan sin duda los 230 MEDALLONES con retratos de personajes que recorren los muros del claustro en los que se representa la genealogía de Cristo según el Evangelio de San Mateo y, la genealogía de la Orden Benedictina, dedicada a la descendencia espiritual de San Benito. En cada capitel de donde arrancan los arcos, hay un busto, y debajo de él se lee su nombre en una cartela que es sostenida por angelitos. En total se estima que las esculturas principales del claustro que corresponden a bustos asciende a 269, con más de 120 esculturas secundarias a base de ángeles, jarrones, florones, etc. siguiendo la profusa decoración que caracteriza al más típico arte plateresco. Por otra parte, todos los capiteles de las pilastras exteriores de la galería de oriente presentan calaveras, tal y como corresponde al De profundis (se trata de un salmo penitencial que suele emplearse principalmente en la liturgia de difuntos). La construcción del claustro alto, sin embargo, no se terminó hasta comienzos del siglo XVII, concretamente en el año 1604. Fue el abad fray Antonio Perroto quien, en el año 1584 encargó la su construcción a Domingo Redondo.
Es un claustro de poca altura y mucho más sencillo que el inferior. En la esquina del nordeste, en la unión de ambos claustros, hay una inscripción que dice: "Comenzose este claustro a 7 de Marzo de 1537 en esta esquina, y acabose en ella a 27 de Marzo de 1604" (es decir, las obras del claustro se iniciaron en 1537 pero no se terminaron hasta el 1604). El pozo y la fuente del jardín datan de finales del siglo XVI, cuando era abad del monasterio fray Ambrosio de Nájera. PUERTA DE LAS PROCESIONES. El claustro está comunicado con la iglesia a través de una portada denominada Puerta de las Procesiones, de forma abocinada y arco rebajado, presenta decoración de tramados y elegantes cintas que nos recuerdan a los orígenes medievales del monasterio.
En las enjutas, en dos medallones en relieve, están esculpidos la sibila Europa y el profeta Daniel. Además, el tímpano se remata con un crucifijo en la que se plasma la celebración de la Eucaristía, ya que encontramos la representación de un nido de pelícano alimentando a sus crías con su propia carne y sobre él la figura de Cristo crucificado.,, NAZARIO MATOS..