Todo sigue igual en mi pueblo, a mi me gusta pasear por la mañana temprano y oler a campo, con todos sus matices, perderse entre trigos, cebadas, alfalfas, garbanzos, lentejas y otras plantas del campo, me gusta ver las olas de mi Castilla esas olas del trigo y las cebadas, esos olores a tierra seca y mojada cuando llueve, a ese cielo azul de día y las estrellas de la noche, en el pueblo me encuentro muy bien, pensando en mi niñez me paso muchas horas, de los juegos de mis padres y hermanas y hermanos de mi familia en casa qué aún siendo pobres y no había mucha comida pero si alegría.
Nuestra marcha para la ciudad fue dejar parte de mi niñez en el pueblo, amigos, olores, sensaciones vividas que en la ciudad no tenía, pero a todo se acostumbra el ser humano por eso ahora que ya tengo edad y la salud me lo permite vengo a mi pueblo para rememorar mi niñez y seguir viviendo con mi vida que pasa muy rápido y yo quiero pararla por eso me vengo a mi pueblo.
Ánimo a muchas personas que piensan como yo y ojalá que seamos felices juntos en nuestro pequeño pero gran pueblo donde nos tuvimos que ir por obligación pero ahora estamos por devoción.
AHORA TENEMOS LA OPCIÓN DE HACER LO QUE PODAMOS SIN RENUNCIAR A OTRAS COSAS.
ÁNIMO LENTEJAS Y LENTEJEROS.
Nuestra marcha para la ciudad fue dejar parte de mi niñez en el pueblo, amigos, olores, sensaciones vividas que en la ciudad no tenía, pero a todo se acostumbra el ser humano por eso ahora que ya tengo edad y la salud me lo permite vengo a mi pueblo para rememorar mi niñez y seguir viviendo con mi vida que pasa muy rápido y yo quiero pararla por eso me vengo a mi pueblo.
Ánimo a muchas personas que piensan como yo y ojalá que seamos felices juntos en nuestro pequeño pero gran pueblo donde nos tuvimos que ir por obligación pero ahora estamos por devoción.
AHORA TENEMOS LA OPCIÓN DE HACER LO QUE PODAMOS SIN RENUNCIAR A OTRAS COSAS.
ÁNIMO LENTEJAS Y LENTEJEROS.