La Semana Santa de Valladolid es el principal acontecimiento cultural, religioso y de atracción turística de la ciudad. Sus tallas se encuentran entre las de mayor valor artístipo del mundo en escultura policromada, gracias a importantes imagineros como Juan de Juni y Gregorio Fernández, activos en el periodo en que la ciudad fue corte imperial. Ha sido calificada como la que representa con mayor fidelidad, rigor y detalle la Pasión.
Además del valor artístico y catequético de su imaginería religiosa, se caracteriza por la devoción, sobriedad, silencio y respeto de los cofrades y el público, y por actos singulares como la procesión general de la Sagrada Pasión del Redentor y el Sermón de las Siete Palabras de la Plaza Mayor.
Por todo esto fue la primera en conseguir la declaración de Interés Turístico Internacional en España en 1980. En 1985 también lo consiguio Zamora.
Durante décadas Valladolid, Zamora, Sevilla, Malaga, y Cuenca fueron las únicas ciudades en España que ostentaron el título.
Hoy las declaraciones de interés turístico internacional de las distintas tradiciones de Semana Santa superan las veinte.
Además del valor artístico y catequético de su imaginería religiosa, se caracteriza por la devoción, sobriedad, silencio y respeto de los cofrades y el público, y por actos singulares como la procesión general de la Sagrada Pasión del Redentor y el Sermón de las Siete Palabras de la Plaza Mayor.
Por todo esto fue la primera en conseguir la declaración de Interés Turístico Internacional en España en 1980. En 1985 también lo consiguio Zamora.
Durante décadas Valladolid, Zamora, Sevilla, Malaga, y Cuenca fueron las únicas ciudades en España que ostentaron el título.
Hoy las declaraciones de interés turístico internacional de las distintas tradiciones de Semana Santa superan las veinte.