ATRAVESANDO ESA CASTILLA
Cuando atravieso esa Castilla sedienta, como nos explicó. Don Antonio Machado, Mi corazón siente como si dejara atrás mis sentimientos humanos, es algo que solo cuando has vivido toda o parte de tu juventud sobre su suelo se puede entender. Te parece imposible el recordar tanto tus años en esa tierra seca y polvorienta, Donde descansan mis mayores desde el año 1500, que vinieron de Medina del Campo, Para afincarse en ese Valle donde estuvo el Arroyo de La Perdiz, el llamado Monte Iniesto. Entonces. La Tala, Ahora que no tengo prisa por nada, solamente el llegar a Galicia lo antes posible, miro esos paramos y laderas que me hacen sentir mucho más digno, Es imposible borrar tu tiempo de ir a la escuela, de escuchar aquel maestro que vino de Galicia. Don Jesús Suarez Fernández. Que nos decía medio hablando en su idioma natal “Castilla cría hombres, pero los gasta”. Que sabias palabras de aquel hombre que pasó su vida en mi Villa, donde sufrió cierto clima de represión al ser maestro nacional, y solo su esposa Doña Encarnación, le salvo de algún paso imposible de retroceder, La historia de La Seca la escribió su hijo, Don Ángel Suarez Aláez. Se le quedaron varios detalles sin escribir, quizá no quiso sacar a colación algún pasaje triste y doloroso, Alguna persona mayor que yo, que ya no viven a si me lo contaron. LA OTRA HISTORIA DE LA SECA. Que nadie se atrevió a contar por miedo a la represión o censura. Ahí leyendas que se han quedado borradas, unas por no estar escritas en papel, y otras por no ponernos a escuchar barbaridades que hicieron ciertos seres que se llamaban cristianos, que la dignidad y el respeto a la vida era nulo. Algunas personas de esa Villa que es la mía, se marcharon de allí por no escuchar criticas contra su forma de actuar, el tiempo pasa, y los hijos y nietos con la emigración forzosa, se llevaron parte de esas leyendas que se siguen recordando, fuera de nuestra tierra, en lugares incluso del extranjero. Donde tienen su forma de vida siguen pensando que la tierra no tuvo la culpa, si no de quien no respeto la vida de sus semejantes. G X Cantalapiedra.
Cuando atravieso esa Castilla sedienta, como nos explicó. Don Antonio Machado, Mi corazón siente como si dejara atrás mis sentimientos humanos, es algo que solo cuando has vivido toda o parte de tu juventud sobre su suelo se puede entender. Te parece imposible el recordar tanto tus años en esa tierra seca y polvorienta, Donde descansan mis mayores desde el año 1500, que vinieron de Medina del Campo, Para afincarse en ese Valle donde estuvo el Arroyo de La Perdiz, el llamado Monte Iniesto. Entonces. La Tala, Ahora que no tengo prisa por nada, solamente el llegar a Galicia lo antes posible, miro esos paramos y laderas que me hacen sentir mucho más digno, Es imposible borrar tu tiempo de ir a la escuela, de escuchar aquel maestro que vino de Galicia. Don Jesús Suarez Fernández. Que nos decía medio hablando en su idioma natal “Castilla cría hombres, pero los gasta”. Que sabias palabras de aquel hombre que pasó su vida en mi Villa, donde sufrió cierto clima de represión al ser maestro nacional, y solo su esposa Doña Encarnación, le salvo de algún paso imposible de retroceder, La historia de La Seca la escribió su hijo, Don Ángel Suarez Aláez. Se le quedaron varios detalles sin escribir, quizá no quiso sacar a colación algún pasaje triste y doloroso, Alguna persona mayor que yo, que ya no viven a si me lo contaron. LA OTRA HISTORIA DE LA SECA. Que nadie se atrevió a contar por miedo a la represión o censura. Ahí leyendas que se han quedado borradas, unas por no estar escritas en papel, y otras por no ponernos a escuchar barbaridades que hicieron ciertos seres que se llamaban cristianos, que la dignidad y el respeto a la vida era nulo. Algunas personas de esa Villa que es la mía, se marcharon de allí por no escuchar criticas contra su forma de actuar, el tiempo pasa, y los hijos y nietos con la emigración forzosa, se llevaron parte de esas leyendas que se siguen recordando, fuera de nuestra tierra, en lugares incluso del extranjero. Donde tienen su forma de vida siguen pensando que la tierra no tuvo la culpa, si no de quien no respeto la vida de sus semejantes. G X Cantalapiedra.