Ofertas de luz y gas

LA SECA: NO SON DIABLURAS NI LOCURAS...

NO SON DIABLURAS NI LOCURAS
Aquel hombre en estado de salud complicado, dudando de algunos médicos, caminaba sin una fuerza de voluntad decidida para llegar a la muerte. Eran varios amigos fallecidos, en diferentes formas, y esto le tenía muy preocupado, no sabía dónde su recorrido terminaría, ni tampoco a veces le preocupaba, un amigo de la infancia que era A, T, S, murió en Valladolid, en su propio cuarto de baño, por no querer ingresar en un hospital, al estar con una neumonía, y su recuerdo le acompañaba por todas partes, eran sombras peregrinas. El fallecimiento de su madre era una nota inolvidable, murió en paz sin decir ni una sola nota discordante. Este hombre castellano sin religión conocida, veía la muerte de cerca sin darle ningún miedo, era como si tuviéramos que pasar por ella sin darnos apenas cuenta, varios amigos descansaban para siempre, en diferentes lugares de España. Y tan solo el recordarles era como si pudiera recordar el pasado sin poner trabas, Este hombre no buscaba la eternidad, podía ser muy aburrida, y tan solo deseaba pasar por esta vida sin dejar malos recuerdos, de vez en cuando los dolores le maltrataban, y en su interior su mente recurría a su madre, aquella mujer santa, adoradora de su familia, y mujer que se dejó su vida ayudando a sus familiares y vecinos, este hombre no buscaba diabluras ni sentía locuras, solo soledades de las enfermedades raras, que fluyen para dejar su rastro, que pudiera ser hoy día muy normal. La muerte no es el camino, ni ningún camino nos hablará de la muerte. Todos esperamos un día su llegada, a veces inoportuna, poco conciliadora, y mucho menos seductora. Es el final de esta vida que alguien pudiera decir que es un sueño, pero que a veces se alarga sin verle nunca risueño. G X Cantalapiedra. 20- 7 – 2023.