En mi "pequeño" paseo por Espeja, tuve la suerte de encontrar gente amable.
Una de ellas fue, Honorio y Eloisa. Amablemente converse con ellos durante un rato, sobre todo de la "despoblación"que, por desgracia muchos de nuestros pueblos están sufriendo.
Me sentí afortunada, porqué, no es fácil que la gente de los pueblos hablen con una desconocida, en otros pueblos que he visitado, la gente "recela", y es comprensible, dado que se ha hecho "mofa" de los habitantes del pueblo que acudían a la ciudad, y se les denominaba "catetos", a través de peliculas de los años 60.
Como decía mi abuelo: ¡Cuánto teneis que aprender de los del pueblo!.

(16 de Junio de 2010)