EL BURGO DE OSMA: EL UCERO SE LAMENTA...

EL UCERO SE LAMENTA
Vienen lluvias comedidas
que quieren regar los campos,
a veces son afligidas
y quieren volverse llantos.
El Ucero lo presiente
entre numerosos claros,
y su Ribera lo siente
al ver tiempos que son raros.
La sequía viene andando
mientras notamos sudores,
los calores van dañando
a muchos trabajadores.
Veranos que son marcados
por altas temperaturas,
dejan ríos disecados
entre penosas diabluras.
El Ucero se lamenta
con su corriente temblando,
cuando la sequía aumenta
los álamos van llorando.
Las murallas son testigos
al ver perder la corriente,
los calores dan castigos
que lo nota mucha gente.
El Duero sigue esperando
que le aumente la corriente,
y El Ucero va pensando
que el agua no tiene mente.
El Abión no se activa
al quedar seco su cauce,
y el otoño le motiva
al ver que llora algún sauce.
G X Cantalapiedra.