APELLIDOS SORIANOS
APELLIDOS SOBRE TOPONIMIA (Que llevan el nombre de localidades sorianas)
MATAMALA.- Salvo que los genealogistas digan lo contrario, el apellido Matamala, pese a ser oiginario de Soria, quizás haya que compartirlo, en cuanto a procedencia, con otras poblaciones del mismo nombre, como la Matamala segoviana, pegadita a Matabuena -tenían cierta mala uva, por cierto, los que ponían los nombres, aunque suponemos que los vecinos de la peor parada sean gentes sin complejos, aún más teniendo cercanas las destilerías del güisqui segoviano- y de la que depende administrativamente, ambas en la carretera que une Soria y Segovia. Hay otras dos poblaciones llamadas Matamala en Salamanca y otra en Barcelona. En Soria existe un despoblado, Matamala, en término de Alconaba.
Nuestra Matamala se apellida de Almazán. Según el censo del 1 de enero de 2008 contaba con 365 matamalenses (uno por cada día del año), aunque habría que ver los que allí viven en invierno, claro. Estos vecinos son apodados los bubillos, con lo que se quiere expresar su cortedad de miras. La realidad es otra, si estudiamos sus tradiciones. Su ayuntamiento agrupa a los de Matute de Almazán y Santa María del Prado. Población cercana a Almazán en tierra de pinares.
Los de Matamala se regocijan en las fiestas en honor del Santo Cristo del Amparo, entre el 14 y 17 de septiembre. Según cuenta Goig Soler, en su libro "Soria Pueblo a Pueblo", celebran el 3 de julio una fiesta en honor de San Trifón, en agradecimiento a que ese día cayó un rayo en el interior de la iglesia y, aunque abrió una gran brecha, no hubo que lamentar ninguna desgracia personal.
Además, las mujeres siguen celebrando Santa Águeda y repican las campanas para que no se pongan malos los pechos.
Sigue vigente la cofradía de la Vera Cruz, volviendo a recuperar la tradición de beber en tazas de plata cuando se reúnen los hermanos, al igual que ocurre en otros lugares provinciales.
Por carnaval recorrían el pueblo con una vaquilla. Por San Juan, colocaban flores en las puertas de las casas de las mozas, o lampazos, según se portase la chica. Llamaban a las mozas a painazgo el día de la boda, y todo el pueblo recibía vino y tabaco. Pagaban el piso y las entradas a mozo y vecino. Antaño era muy considerada la Semana Santa de Matamala, con un paso importante del Crucificado articulado, al cual descendían de la cruz y enterraban; cofrades y ataviados de romanos, además de pasos vivientes y representación del sacrificio de Abraham, completaban los ritos.
Su iglesia es la de la Inmaculada Concepción, cuyo mismo nombre llevaba la antigua fábrica resinera, a cuyo alrededor se encontraban secoyas centenarias. Hubo molinos, hornos de destilación de pez y una posada.
Junto a Tardelcuende y Quintana Redonda forma la Comunidad del Río Izana.
El apellido paterno MATAMALA lo llevan 924 españoles, de los que 60 nacieron en tierras sorianas y la emigración los ha dejado en 21. Barcelona -no olvidemos que allí hay otra Matamala y es provincia receptora de emigrantes- tiene 193 nacidos y 244 residentes. También son altas las cifras de Gerona.
APELLIDOS SOBRE TOPONIMIA (Que llevan el nombre de localidades sorianas)
MATAMALA.- Salvo que los genealogistas digan lo contrario, el apellido Matamala, pese a ser oiginario de Soria, quizás haya que compartirlo, en cuanto a procedencia, con otras poblaciones del mismo nombre, como la Matamala segoviana, pegadita a Matabuena -tenían cierta mala uva, por cierto, los que ponían los nombres, aunque suponemos que los vecinos de la peor parada sean gentes sin complejos, aún más teniendo cercanas las destilerías del güisqui segoviano- y de la que depende administrativamente, ambas en la carretera que une Soria y Segovia. Hay otras dos poblaciones llamadas Matamala en Salamanca y otra en Barcelona. En Soria existe un despoblado, Matamala, en término de Alconaba.
Nuestra Matamala se apellida de Almazán. Según el censo del 1 de enero de 2008 contaba con 365 matamalenses (uno por cada día del año), aunque habría que ver los que allí viven en invierno, claro. Estos vecinos son apodados los bubillos, con lo que se quiere expresar su cortedad de miras. La realidad es otra, si estudiamos sus tradiciones. Su ayuntamiento agrupa a los de Matute de Almazán y Santa María del Prado. Población cercana a Almazán en tierra de pinares.
Los de Matamala se regocijan en las fiestas en honor del Santo Cristo del Amparo, entre el 14 y 17 de septiembre. Según cuenta Goig Soler, en su libro "Soria Pueblo a Pueblo", celebran el 3 de julio una fiesta en honor de San Trifón, en agradecimiento a que ese día cayó un rayo en el interior de la iglesia y, aunque abrió una gran brecha, no hubo que lamentar ninguna desgracia personal.
Además, las mujeres siguen celebrando Santa Águeda y repican las campanas para que no se pongan malos los pechos.
Sigue vigente la cofradía de la Vera Cruz, volviendo a recuperar la tradición de beber en tazas de plata cuando se reúnen los hermanos, al igual que ocurre en otros lugares provinciales.
Por carnaval recorrían el pueblo con una vaquilla. Por San Juan, colocaban flores en las puertas de las casas de las mozas, o lampazos, según se portase la chica. Llamaban a las mozas a painazgo el día de la boda, y todo el pueblo recibía vino y tabaco. Pagaban el piso y las entradas a mozo y vecino. Antaño era muy considerada la Semana Santa de Matamala, con un paso importante del Crucificado articulado, al cual descendían de la cruz y enterraban; cofrades y ataviados de romanos, además de pasos vivientes y representación del sacrificio de Abraham, completaban los ritos.
Su iglesia es la de la Inmaculada Concepción, cuyo mismo nombre llevaba la antigua fábrica resinera, a cuyo alrededor se encontraban secoyas centenarias. Hubo molinos, hornos de destilación de pez y una posada.
Junto a Tardelcuende y Quintana Redonda forma la Comunidad del Río Izana.
El apellido paterno MATAMALA lo llevan 924 españoles, de los que 60 nacieron en tierras sorianas y la emigración los ha dejado en 21. Barcelona -no olvidemos que allí hay otra Matamala y es provincia receptora de emigrantes- tiene 193 nacidos y 244 residentes. También son altas las cifras de Gerona.
