Muchas gracias paisano, trabajaré sobre tu texto, intento contestarte: Fíjate como se distorsionan las cosas en la imaginación de un niño. Nunca he visto la imagen que refieres, por lo que no asociaba la minica a una cara. Siempre en el contexto de la iglesia, la minica para mí era una mano negra, por lo que podría estar relacionada con el relato que refieres del abrazo, que aparecía en el fondo de la iglesia. La situaba en el fondo de la iglesia, probablemente porque era donde estuviera guardada, o, donde os situabais para vuestras apuestas. ¡Ya os vale! Aunque hayan pasado tantos años.
Fuera de allí, la mano negra apareció en otras ocasiones con mis amigas, casualmente había en escena un hermano mayor que nos rescataba de la situación terrorífica que se creaba ¡no apto para cardiacos!
¿Sabes? se le atribuía la gracia de si la citabas tres veces pidiéndole que te despertara a una determinada hora lo hacía. Yo lo utilicé durante mi adolescencia para no llegar tarde a la s excursiones y pude comprobar el gran poder que tiene el autosugestionarse. ¡Cuanta protección a la inocencia de la niñez daba el pueblo! Un saludo, C.
Fuera de allí, la mano negra apareció en otras ocasiones con mis amigas, casualmente había en escena un hermano mayor que nos rescataba de la situación terrorífica que se creaba ¡no apto para cardiacos!
¿Sabes? se le atribuía la gracia de si la citabas tres veces pidiéndole que te despertara a una determinada hora lo hacía. Yo lo utilicé durante mi adolescencia para no llegar tarde a la s excursiones y pude comprobar el gran poder que tiene el autosugestionarse. ¡Cuanta protección a la inocencia de la niñez daba el pueblo! Un saludo, C.