POVEDA DE LAS CINTAS: EL DIVERTIDO ANIVERSARIO POR ANTONOMASIA DE LAS ACÉMILAS....

Estaba buscando el avión Don EFE, pero Paris bien vale una misa, le dedico unas palabras y después continuaré con la búsqueda.
Dicen, y será cierto, que el hombre es un animal de costumbres, y quizá, por la costumbre de leerle durante ya muchos años por lo menos una o dos veces a la semana, para bien o para mal le echaba de menos y tenía intenciones de ponerle cuatro letras para interesarme por su salud, diez días son muchos días, pero me alegro de leerle de nuevo.
Sin duda habrá usted oído, estudiado tal vez, la Teoría del Caos y en concepto el llamado efecto mariposa, que asegura más o menos que el aleteo de una mariposa en Zamora por ejemplo, puede desatar un Tsunami en el mar de la China al otro lado del mundo. Suponiendo así que, una pequeña perturbación iniciada en Zamora y mediante un proceso de amplificación, podría generar un efecto considerablemente más grande a mediano o corto plazo de tiempo en Crimea, por ejemplo.
Pensando en estos principios, no puedo por menos de no atormentarme pensando que quizá esta disputa en este humilde foro origine la obscenidad de una tercera Guerra Mundial y, en ese caso cabría preguntarse si pasaremos a la Historia usted y yo por ser los últimos luchadores de la Segunda Guerra Mundial o los primeros de la Tercera.
En el fondo, usted es como yo: un poco acémila, viendo a lo que hemos dado lugar. Claro que, si usted se empeña seremos un poco "acémilos", por mucho que yo le diga, y lo sé de sobra por ser de pueblo y nunca, ¡jamás de los jamases!, he oído, escuchado, sentido o percibido en parte alguna lo de "acemilo", y por lo tanto, podemos asegurar que los "acemilos" no existen, los llamamos "machos" en el pueblo, aunque no ejercen de tales por mucho que aparenten, pero si se empeña, que usted puede y suele hacerlo, borraremos de la memoria de la gente lo del "macho" para llamarlo "acemilo". Por eso no he llegado más lejos y me quedé donde me quedé ¡claro!

EL DIVERTIDO ANIVERSARIO POR ANTONOMASIA DE LAS ACÉMILAS.

Anteayer, día 18 de marzo de 2017 actual, sin pretenderlo se me ocurrió y no por casualidad, recorrer páginas atrás, y por ello, encontrarme con una de las que se distinguen y no se olvidan dada la circunstancia de figurar en este devocionario de episodios felices topándome con ésta de la misma fecha, 18 de marzo, pero de de 2014, es decir, de dos años ha, ya que, tal y como podrá comprobarse, se cumple el 2º aniversario de su existencia en fecha tan significada como la de la víspera de la festividad San José, y por consiguiente, la del panfleto en cuestión a cargo de su autor, el dignísimo señor "Yo no me llamo Gardel", circunstancia que permite recordarla aún con mayor fervor, dada su coincidencia católico-apostólica-romana de tan señalada fecha.

Por otra parte, no deja de ser igualmente significativo el que su contenido haya sido adornado con diversos plácemes del "me gusta" (hasta 13), lo que pone de manifiesto el encendido fervor de los seguidores hacia tan distinguido autor, y sobre todo, el de su contenido, oriundo del celebérrimo "Yo no me llamo Gardel", el cual, casi pierde el avión para llegar a su misa antes de de embarcar para París. Los encendidos "elogios" que en él me dedica compartiendo con él lo de acémila, es decir, lo de mulo o macho de carga, es para nota. No obstante, para completar el "INRI" al que me expone, rompe el emparejamiento de lo que significan estas dos bestias añadiendo lo de que, "EL OTRO, NO ÉL, PUEDE Y SUELE HACERLO, es decir, que he levado a cabo alguna veces lo de mulo ó bestia de carga. Este relato, respaldado por sus trece admiradores que no deseo comparar, por supuesto, con lo de las acémilas o bestias de carga, es de los que no tiene desperdicio.! Pues que sea "enhorabuena" para él y para los que lo aplauden!.