¡QUÉ NOCHE LA DE AQUEL DÍA!.
¡Creo que fue la del 18 de junio último!. Un tipo de los que por aquí pululan como el pulpo "Pool", llevado de la falsa creencia de que estaba contribuyendo a mejorar el buen decir de este lugar, ¡perdón!, quería decir ensayándose en pronosticar quién iba a ser el próximo campeón de los mundiales de fútbol, y por tanto, deambulando como uno más de acá para allá con el señuelo de que su contribución a hacer más variado y atrayente el mundillo de esta pizarra y el ambiente mensajeril de este rincón, tenía alguna utilidad y además era posible, (¡qué error, qué inmenso error, parodiando al ministro de marras!), incurrió en un desacierto ya que, el tipo en cuestión que aquella noche escribía se estaba equivocando rotundamente en virtud de que, tan loable afición, era pura teoría espúrea pues incurrió en el más horrendo de los delitos cual fue el de borrar lo que había escrito (no es ningún pareado), horas después del evento, hasta el punto de que, no contento (otro pareado), cometió el grave error de sin pedir permiso, ofendió al infrascrito, dando lugar al desafuero que le dejó sin fuero ni huevo, vulgo "con el culo al aire", valga la expresión. Por tanto pido perdón, acongojado y contrito, hasta que se conozca lo escrito, que de mi venganza sea pregón, para purgar en oración, si tal error fue delito. Y si no...!, ¡ah..., ésa será otra cuestión!.
Pero de esta historia falta lo mejor. Ya..., ¡ya lo veremos, con "perlas" inclusive!.
¡Creo que fue la del 18 de junio último!. Un tipo de los que por aquí pululan como el pulpo "Pool", llevado de la falsa creencia de que estaba contribuyendo a mejorar el buen decir de este lugar, ¡perdón!, quería decir ensayándose en pronosticar quién iba a ser el próximo campeón de los mundiales de fútbol, y por tanto, deambulando como uno más de acá para allá con el señuelo de que su contribución a hacer más variado y atrayente el mundillo de esta pizarra y el ambiente mensajeril de este rincón, tenía alguna utilidad y además era posible, (¡qué error, qué inmenso error, parodiando al ministro de marras!), incurrió en un desacierto ya que, el tipo en cuestión que aquella noche escribía se estaba equivocando rotundamente en virtud de que, tan loable afición, era pura teoría espúrea pues incurrió en el más horrendo de los delitos cual fue el de borrar lo que había escrito (no es ningún pareado), horas después del evento, hasta el punto de que, no contento (otro pareado), cometió el grave error de sin pedir permiso, ofendió al infrascrito, dando lugar al desafuero que le dejó sin fuero ni huevo, vulgo "con el culo al aire", valga la expresión. Por tanto pido perdón, acongojado y contrito, hasta que se conozca lo escrito, que de mi venganza sea pregón, para purgar en oración, si tal error fue delito. Y si no...!, ¡ah..., ésa será otra cuestión!.
Pero de esta historia falta lo mejor. Ya..., ¡ya lo veremos, con "perlas" inclusive!.