En la rivera de Dos Casas, ALDEA DEL OBISPO

(25 de Diciembre de 2016)
Sin duda, cruzar la rivera por las piedras era cuestión de habilidad y agilidad, la mayor parte de la gente lo hacia con soltura para ir de Aldea a Castillejo y viceversa; este es el camino más corto para ir de un pueblo a otro y, sobre todo, si el recorrido era a pie o saltabas de piedra en piedra o te mojabas los pies. Supongo que alguno daría en alguna ocasión con su cuerpo en el agua, serían los menos, pero sería motivo de disgusto para el que se bañaba sin ganas y de jolgorio para quien presenciara...