Hace unos días me voy a súper a comprar para la semana, mejor dicho voy al Dia, encuentro una lata de peso neto 1.000gr. peso escurrido 650gr, de caballa a 5.69€, ¿caballa?, ¡no la pareja del caballo! ese pescado azul, voy a investigar primero.
Os dejo la página con todas las maravillosas cosas buenas que tiene la caballa, está en aceite vegetal, bien, me pareció un buen precio, solo hace falta que tenga calidad marca Grandes Hoteles, la conozco, es buena marca, bueno pues al carro.
Tenía amigos a comer de esos que bendices porque comen de todo... pues de esos, son de muchas ensaladas, nada de carnes porfa me dicen, ¡vale!, preparé unas hojas de lechuga bien escurridas, en ese estupendo aparato para escurrir ensaladas, quedan perfectas, las puse en una bandeja, picadas a término medio, mezcladas, hoja de roble, primavera, las que encontré, unas patatas cocinas, cortadas en rodajas de un dedo de grosor más o menos, encima colocaditas, pimiento rojo le iba a caramelizar, pero entre ir de monte y caramelizar el pimiento... ganó el monte, total que abrí un tarro de pimientos del piquillo y tenía uno grande rojo natural, le pelé otro invento estupendo el pelatomates, que también vale para pimientos en un momento pimiento pelado, en tiras y dispuesto encima de las patatas, mezclado el de bote y el natural ¡ala, a convivir!, saque la caballa, la dejé escurrir muy bien, apretándola un poco para sacar todo el aceite, tiene unos filetes estupendos, cortados a la mitad, encima del pimiento variado, cuatro huevos cocidos cortados en gajos, colocados por el centro de la caballa, y al final me dice la amiga,- tienes aquí una manzana que se está poniendo mala, ¿eh?, trae pacá, pelo manzana ya estábamos en la mesa, y pico pico y pico, ya está, aderezado con un chorritin de aceite de oliva, reducción de vinagre de Módena y sal Maldon: escamas de sal marina, que salan poco y lucen mucho. Postre arroz con leche y canela, y un café especial que supieron apreciar.
Para algunos quizá es poco como comida principal, pero os aseguro que es muy nutritivo y debería de ser suficiente, siempre podéis poner un segundo plato suave, yo creo que no... pero, hay quien como por tres.
Os dejo la página con todas las maravillosas cosas buenas que tiene la caballa, está en aceite vegetal, bien, me pareció un buen precio, solo hace falta que tenga calidad marca Grandes Hoteles, la conozco, es buena marca, bueno pues al carro.
Tenía amigos a comer de esos que bendices porque comen de todo... pues de esos, son de muchas ensaladas, nada de carnes porfa me dicen, ¡vale!, preparé unas hojas de lechuga bien escurridas, en ese estupendo aparato para escurrir ensaladas, quedan perfectas, las puse en una bandeja, picadas a término medio, mezcladas, hoja de roble, primavera, las que encontré, unas patatas cocinas, cortadas en rodajas de un dedo de grosor más o menos, encima colocaditas, pimiento rojo le iba a caramelizar, pero entre ir de monte y caramelizar el pimiento... ganó el monte, total que abrí un tarro de pimientos del piquillo y tenía uno grande rojo natural, le pelé otro invento estupendo el pelatomates, que también vale para pimientos en un momento pimiento pelado, en tiras y dispuesto encima de las patatas, mezclado el de bote y el natural ¡ala, a convivir!, saque la caballa, la dejé escurrir muy bien, apretándola un poco para sacar todo el aceite, tiene unos filetes estupendos, cortados a la mitad, encima del pimiento variado, cuatro huevos cocidos cortados en gajos, colocados por el centro de la caballa, y al final me dice la amiga,- tienes aquí una manzana que se está poniendo mala, ¿eh?, trae pacá, pelo manzana ya estábamos en la mesa, y pico pico y pico, ya está, aderezado con un chorritin de aceite de oliva, reducción de vinagre de Módena y sal Maldon: escamas de sal marina, que salan poco y lucen mucho. Postre arroz con leche y canela, y un café especial que supieron apreciar.
Para algunos quizá es poco como comida principal, pero os aseguro que es muy nutritivo y debería de ser suficiente, siempre podéis poner un segundo plato suave, yo creo que no... pero, hay quien como por tres.
