Bueno la noticia no está en sacristanías sino en la quesería. Una muy mala noticia, pues Herrera pierde tal vez la única empresa que tiene, y con ello la comarca se convierte en un páramo industrial privando al pueblo de recursos económicos, y llevando a las familias a un incierto futuro, que se muestra incapaz de sostener el bajísimo índice de natalidad del pueblo, no quedando otro recurso que la emigración.