Permitidme transcribir un bello poema del recientemente fallecido José María Fernández Nieto.
Porque sin amar, vivir
es ir hacia ningún sitio,
es no saber donde vamos
ni de donde hemos venido.
Vale la pena
haber nacido para amar.
Es mi recuerdo al ilustre palentino.
Porque sin amar, vivir
es ir hacia ningún sitio,
es no saber donde vamos
ni de donde hemos venido.
Vale la pena
haber nacido para amar.
Es mi recuerdo al ilustre palentino.
Me uno a ti en ese homenaje póstumo del insigne poeta palentino D. Jose Maria Fernández Nieto. De los muchos poemas escritos por el he extraído un soneto del titulado "Quien es tan ruin". Una denuncia a la cicatería del egoísmo.
Y dice así:
La creación es como un río prodigioso
de amor, y si se inunda la campiña
o se devasta el fruto o gime la cosecha,
es porque hay alguien que levanta diques,
muros de contención.
Basta un insulto para que el agua vaya turbia.
Basta hablar solo beber a escondidas para frenar el pulso
de las venas y sentir cómo el hambre multiplica
sus bocas, y cómo el cielo, el lodo, el barro
levantan barricadas sobre el cauce.
Y dice así:
La creación es como un río prodigioso
de amor, y si se inunda la campiña
o se devasta el fruto o gime la cosecha,
es porque hay alguien que levanta diques,
muros de contención.
Basta un insulto para que el agua vaya turbia.
Basta hablar solo beber a escondidas para frenar el pulso
de las venas y sentir cómo el hambre multiplica
sus bocas, y cómo el cielo, el lodo, el barro
levantan barricadas sobre el cauce.
