PUENTE ALMUHEY: Es nuestra vida un laberinto...

Es nuestra vida un laberinto

al que llegamos el día en que nacemos

y dependiendo de las decisiones que tomemos

alcanzaremos el final del camino

desconociendo si lo hicimos por el lugar correcto.

Todo en nuestra vida son decisiones a tomar

sin que haya opciones correctas o incorrectas

sin que ellas sean aciertos o desaciertos

sin que signifiquen fracasos o éxitos

y mucho menos errores en aquello que hacemos,

simplemente elegimos el camino a tomar

en cada encrucijada que el laberinto presente.

Si decidimos caminar en lugar de tomar el metro,

si decidimos una ducha en lugar de tomar un baño,

si decidimos una ropa que ponernos en lugar de otra,

si decidimos decir ‘te quiero’ o dejarlo para otro momento,

si decidimos en esta ocasión callar en lugar de hablar,

si decidimos viajar al mar en lugar de hacerlo a la montaña,

si decidimos reír esta vez en lugar de llorar…


¿Cuál será la decisión correcta?

¿Cuál de todas ellas será la incorrecta?

Quizá todas sean buenas.

Quizá lo sea ninguna.

Elegimos nuestro destino a cada instante

a cada sístole o diástole

a cada inspirar o espirar

en el caminar de nuestra vida

siendo imposible desandar el camino

que ya ha sido recorrido.

No hay ningún ovillo de hilo

que marque el rumbo a tomar,

solo nuestra memoria recordará

lo que ya es pasado;

mas nunca la que fue nuestra entrada

podrá ser nuestra puerta de salida.

Avanzar,

siempre avanzar;

decidir,

siempre decidir;

solo así alcanzaremos nuestro destino,

de lo contrario será él quien venga a buscarnos

y nos encontrará tal vez en la duda

sin haber sabido utilizar el tiempo

que la vida cada mañana nos procura.

José Manuel Contreras