He visto dos estrellas fugaces
cruzar la noche sin luna
parecían jugar a encontrarse
aun siendo dos desconocidas
una pequeña estrella
observaba titilante en la distancia
nació de una de ellas.
Cuán oscura se antoja la noche
cuando el miedo
atenaza los corazones.
Tres estrellas en un firmamento infinito
en el que la distancia es nada
y todo está por acontecer
los astros parecían confabulados
para provocar el encuentro
y el encuentro fue.
Quisiera ser esa estrella fugaz
que fue madre
contar con su fuerza y su timidez
con su dulzura y sus miedos
con sus ganas de brillar
y gritarle a la noche
estoy enamorada.
Quisiera ser esa estrella fugaz
que a la luz del día
se encontró con ella
y sin conocer
aún el brillo de su mirada
perdida en un instante su huella
decidió salir a buscarla.
Quisiera ser esa pequeña estrella
que desde su temor todo lo observa
quizá se olviden de ella
si ambas de nuevo se encuentran
parece confesarle a su noche.
Y la noche que todo lo sabe
y la noche que todo conoce
le susurra serena al viento
para ahuyentar sus temores
acompañarás su espacio
acompañarás su tiempo
pues una vez se encuentren
volarás a su lado
hasta que de ti nazca una estela.
Cuán brillante se encuentra la noche
cuando el miedo
deshabita los corazones.
José Manuel Contreras
cruzar la noche sin luna
parecían jugar a encontrarse
aun siendo dos desconocidas
una pequeña estrella
observaba titilante en la distancia
nació de una de ellas.
Cuán oscura se antoja la noche
cuando el miedo
atenaza los corazones.
Tres estrellas en un firmamento infinito
en el que la distancia es nada
y todo está por acontecer
los astros parecían confabulados
para provocar el encuentro
y el encuentro fue.
Quisiera ser esa estrella fugaz
que fue madre
contar con su fuerza y su timidez
con su dulzura y sus miedos
con sus ganas de brillar
y gritarle a la noche
estoy enamorada.
Quisiera ser esa estrella fugaz
que a la luz del día
se encontró con ella
y sin conocer
aún el brillo de su mirada
perdida en un instante su huella
decidió salir a buscarla.
Quisiera ser esa pequeña estrella
que desde su temor todo lo observa
quizá se olviden de ella
si ambas de nuevo se encuentran
parece confesarle a su noche.
Y la noche que todo lo sabe
y la noche que todo conoce
le susurra serena al viento
para ahuyentar sus temores
acompañarás su espacio
acompañarás su tiempo
pues una vez se encuentren
volarás a su lado
hasta que de ti nazca una estela.
Cuán brillante se encuentra la noche
cuando el miedo
deshabita los corazones.
José Manuel Contreras