Cuando desees soltar una lagrima,
seré la copa que sostenga tu llanto,
y si el dolor se da cita con el cielo
como azul espejo, caído de una estrella
te veras sonreír y de nuevo soñando.
En el resplandor de un transparente alba
te haré ver lo hermosa que es tu alma,
apeate de lo que te aqueja, tu dolor.
A veces hay que llorar para poder reír
descansa, y halla muy en tu interior
la fuerza que habita en tí, y levanta,
levanta tus metas y deseos con credo,
y lograras prevalecer.
Este que habla es tu propio corazón,
Te pido comprende, que en la vida
todo nos hace crecer.
Francisco J. Cartagena Mendez
seré la copa que sostenga tu llanto,
y si el dolor se da cita con el cielo
como azul espejo, caído de una estrella
te veras sonreír y de nuevo soñando.
En el resplandor de un transparente alba
te haré ver lo hermosa que es tu alma,
apeate de lo que te aqueja, tu dolor.
A veces hay que llorar para poder reír
descansa, y halla muy en tu interior
la fuerza que habita en tí, y levanta,
levanta tus metas y deseos con credo,
y lograras prevalecer.
Este que habla es tu propio corazón,
Te pido comprende, que en la vida
todo nos hace crecer.
Francisco J. Cartagena Mendez